Este jueves el Ejército de Irán publicó un video del momento en el que derribó un dron de vigilancia estadounidense sobre el Estrecho de Ormuz.

En el video, que fue publicado en redes sociales, se ve el momento en el que el objetivo fue impactado por un misil disparado desde una batería de defensa aérea.

Se dice que el objetivo era el dron de reconocimiento tipo Northrop Grumman RQ-4 Global Hawk de Estados Unidos.

Los Cuerpos de la Guardia Revolucionaria Islámica (CGRI) anunciaron este jueves que habían derribado este dron.

Irán y Estados Unidos están en desacuerdo con respecto al lugar donde fue derribado el dron. Teherán asegura que el avión estaba invadiendo su espacio aéreo, mientras que Washington afirma que fue en espacio aéreo internacional.

Después, este mismo jueves, el ministro de Asuntos Exteriores de Irán, Javad Zarif, también compartió las coordinadas desde donde fue derribado el dron y anunció que los escombros cayeron en aguas territoriales iraníes.

“A las 00:14 el dron estadounidense despegó desde Emiratos Árabes Unidos en modo de sigilo y violó el espacio aéreo iraní. Fue atacado a las 04:05 en las coordinadas (25°59'43"N 57°02'25"E) cerca de Kouh-e Mobarak”, escribió Zarif en su cuenta de Twitter.

“Hemos recuperado secciones del dron militar de Estados Unidos en NUESTRAS aguas territoriales, en donde fue derribado”, agregó el ministro iraní.

Tensiones entre Estados Unidos e Irán

El Mando Central de los Estados Unidos (CENTCOM) dijo este jueves que un avión de vigilancia había sido “derribado por sistema de misil tierra-aire mientras operaba en espacio internacional aéreo sobre el Estrech de Ormuz”.

El Northrop Grumman RQ-4 Global Hawk, un vehículo de gran altitud no tripulado, es utilizado por la Armada de Estados Unidos para propósitos de reconocimiento.

Después del incidente, el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, advirtió en su cuenta de Twitter que “Irán cometió un gran error”.

Esta serie de declaraciones se ha dado en medio de una creciente hostilidad entre Washington y Teherán en el Golfo Pérsico.

Las tensiones entre Washington y Teherán han aumentado progresivamente desde el año pasado, cuando Estados Unidos decidió retirarse unilateralmente del importante acuerdo nuclear que fue firmado en 2015 entre Irán y los cinco miembros permanentes del Consejo de Seguridad de la ONU más Alemania.

Como parte de su “campaña de presión máxima”, la administración de Trump ha emprendido una serie de acciones que buscan acabar con el acuerdo, incluida la reimposición de sanciones petroleras a Irán.

Estados Unidos también ha aumentado su presencia militar en Oriente Medio, desplegando un equipo de ataque, baterías de misiles Patriot, justificando sus acciones por las presuntas amenazas de Irán.

Este lunes, la administración de Trump anunció que enviaría otros 1.000 soldados a Oriente Medio.

*Daniela Mendoza contribuyó con la redacción de esta nota.