El primer ministro del Reino Unido enfrenta nuevas presiones ante el creciente éxodo de asesores y asistentes

El primer ministro del Reino Unido, Boris Johnson, se enfrenta a un éxodo creciente de asesores y asistentes de su administración en Downing Street.

Elena Narozanski, asesora especial de Johnson sobre mujeres e igualdades, se convirtió en la última en ofrecer su renuncia este viernes 4 de febrero, un día después de que cuatro asesores principales renunciaran a sus cargos.

El éxodo comenzó el jueves con la jefa de políticas, Munira Mirza, quien había trabajado con Johnson por 14 años y era considerada una de sus asesoras de mayor confianza.

Sin embargo, la renuncia de Mirza no fue en respuesta al escándalo de las fiestas durante el confinamiento, conocidas como 'Partygate', sino a los comentarios inapropiados que Johnson hizo sobre Keir Starmer, presidente del Partido Laborista y líder de la oposición.

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“Usted es consciente del motivo de mi decisión: creo que estuvo mal de su parte insinuar esta semana que Keir Starmer fue personalmente responsable de permitir que Jimmy Savile escapara de la justicia”, dijo Mirza, en referencia a la falsa acusación de Johnson sobre Starmer cuando era fiscal público, de no procesar a Savile, celebridad de la televisión y delincuente sexual en serie.

“No había una base justa o razonable para esa afirmación. Este no era un argumento habitual de la política. Fue una referencia inapropiada y partidista a un caso horrendo de abuso sexual infantil”, agregó Mirza.

Poco después de la salida de Mirza, el director de comunicaciones, Jack Doyle, presentó su dimisión también.

Doyle, un experiodista, asistió a una de las muchas fiestas ilegales celebradas en Downing Street en diciembre de 2020, durante un confinamiento nacional debido a las restricciones por la pandemia del coronavirus.

Sin embargo, Doyle dijo que tenía la intención de irse después de haber servido en la administración de Johnson durante dos años. Según los informes, dijo que las revelaciones del escándalo ‘Partygate’ afectaron su vida familiar “terriblemente”.

Martin Reynolds, el secretario principal de Johnson, presentó su renuncia poco después que Doyle. Fue la persona responsable de enviar un correo electrónico invitando al personal de Downing Street a una fiesta con bebidas alcohólicas en mayo de 2020, durante el primer confinamiento nacional.

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El correo electrónico de Reynolds se filtró el mes pasado y luego se descubrió que Johnson y su esposa, Carrie Symonds, también asistieron a la reunión social.

Reynolds, sin embargo, volverá a ocupar un puesto en la Oficina de Exteriores británica.

El siguiente en irse fue el jefe de gabinete, Dan Rosenfield, quien trabajó en el Tesoro para los excancilleres Alistair Darling y George Osbourne, antes de unirse a Johnson en 2021.

Además de las renuncias, varios legisladores conservadores presentaron cartas de desconfianza al liderazgo de Johnson, y otros tres anunciaron públicamente poca confianza en el primer ministro a principios de esta semana.

*Traducido por Daniel Gallego.