La Corte Suprema de Israel le pidió al gobierno del primer ministro Benjamín Netanyahu que “justifique” una prohibición de llevar a cabo oraciones judías dentro de la Explanada de las Mezquitas, donde se encuentra la Mezquita Al-Aqsa en Jerusalén Este.

El diario israelí Maariv informó el viernes que el tribunal, la máxima autoridad judicial de Israel, le dio al gobierno 60 días para dar una razón por la cual a los judíos se les prohibía orar en el lugar sagrado.

La medida respondería a una petición presentada ante el tribunal por el Centro Israelí para la Promoción de la Democracia y los Derechos Humanos, una ONG que objeta lo que describe como “restricciones del gobierno a los no musulmanes” en el complejo de la mezquita.

“La policía israelí... usa su autoridad para aplicar políticas explícitamente discriminatorias [contra los fieles judíos] que violan la libertad de culto”, dice la petición.

“La prohibición a los visitantes no musulmanes del Monte del Templo [otro nombre con el que se conoce la Explanada de las Mezquitas] ha estado vigente durante décadas”, agregó la ONG.

No está claro si la solicitud de la Corte abrirá camino para una decisión legal que les permita a los judíos rezar en la Explanada de las Mezquitas.

Desde 2003, las autoridades israelíes han permitido que los colonos judíos entren en Al-Aqsa en un número que aumenta cada vez más aunque les prohíben orar dentro del sitio.

Para los musulmanes, Al Aqsa representa el tercer lugar más sagrado de su fe. Por su parte, los judíos llaman al área el “Monte del Templo”, donde se ubicaron dos importantes templos judíos en la antigüedad.

Israel ocupó Jerusalén Este en 1967 y anexó la ciudad entera en 1980, proclamando a esta como la capital del Estado judío, una moción nunca reconocida por la comunidad internacional.

*Daniela Mendoza contribuyó con la redacción de esta nota.