Una comisión de la ONU dijo este lunes que las Fuerzas de Seguridad de Israel violaron los derechos humanos internacionales y el derecho humanitario en la franja de Gaza ocupada por Palestina.

"Algunas de esas violaciones pueden constituir crímenes de guerra o crímenes de lesa humanidad, y deben ser investigadas de inmediato por Israel", dijo Betty Kaari Murungi, comisionada de Kenia, en un informe publicado por la Comisión Independiente de Investigación de las Naciones Unidas sobre las Protestas en el Territorio Palestino Ocupado.

Murungi destacó que los soldados israelíes mataron e hirieron a civiles durante las protestas de la Gran Marcha del Retorno, los cuales no estaban "participando directamente en las hostilidades ni representando una amenaza inminente para las Fuerzas de Seguridad de Israel o para la población civil israelí".

La comisión instó a Israel a revisar sus reglas de compromiso antes de una gran protesta prevista para el aniversario de la Gran Marcha del Retorno.

"Presentamos este informe exhaustivo con un pedido urgente a Israel para que se asegure de inmediato que las reglas de participación de sus fuerzas de seguridad sean revisadas, para cumplir con las normas legales internacionales", dijo el presidente de la Comisión de Argentina, Santiago Canton, al Consejo de Derechos Humanos.

Canton agregó que el "uso excesivo de la fuerza" que tuvo lugar el 30 de marzo, 14 de mayo y 12 de octubre de 2018 "no debe repetirse".

Al recordar la declaración de un alto funcionario israelí de que "todas y cada una de las balas" disparadas por las fuerzas de seguridad durante las protestas habían recibido la autorización de un comandante experimentado, Canton dijo que la comisión encontró que la fuerza letal había sido autorizada ilegalmente "en la mayoría de los casos".

"Esto inevitablemente condujo a la privación arbitraria de la vida", dijo.

Además, subrayó que las fuerzas de seguridad israelíes dispararon e hirieron a 6.016 manifestantes con munición real solo en 2018, dejando 189 muertos.

"La Comisión descubrió que no había ninguna justificación para que las fuerzas de seguridad de Israel mataran e hirieran a personas que no representan una amenaza inminente de muerte o lesiones graves a quienes los rodean, incluidos periodistas, trabajadores de la salud y niños", agregó Canton.

Según él, las prácticas de las fuerzas de seguridad israelíes de disparar a los llamados "incitadores clave" o "alborotadores clave" por acciones tales como quemar neumáticos, cortar o romper la cerca de separación entre Israel y Gaza, o las multitudes dirigidas hacia la cerca contribuyeron a más "acciones ilegales".

"Estamos totalmente en desacuerdo con la sugerencia de que tener como objetivo a estos manifestantes cumple con altos estándares de derechos humanos para el uso de la fuerza letal", dijo Canton, quien pidió a los manifestantes en Gaza que mantengan las protestas "totalmente pacíficas y no violentas", de acuerdo con los principios establecidos por los iniciadores de este movimiento.

*Maria Paula Triviño contribuyó con la redacción de esta nota.