El comandante de las fuerzas especiales de la División de Al Hamza, uno de los componentes del Ejército Nacional Sirio (SNA), Saif Abu Bakr, recuerda que el principal objetivo de la Operación Escudo del Éufrates fue eliminar al Daesh del noroeste de Siria e impedir que el YPG/PKK estableciera un corredor a lo largo del norte del país árabe.

En declaraciones al corresponsal de la Agencia Anadolu, con motivo del cuarto aniversario de la operación militar conjunta con las Fuerzas Armadas turcas, Abu Bakr explica que su objetivo era crear una zona segura donde poder albergar a los civiles que escapaban de la opresión de estas organizaciones terroristas.

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Abu Bakr cuenta que el YPG/PKK arrebató al Daesh el municipio de Manbij, al oeste del Éufrates, y que los informes de inteligencia apuntaban a que el YPG/PKK se dirigía hacia el municipio de Jarablus, en la frontera con Turquía.

“Nos dirigimos a Jarablus a través de Turquía. Empezamos a recibir apoyo aéreo y de artillería. Así empezó la Operación Escudo del Éufrates”, dice Abu Bakr.

El comandante relata que el SNA, el Ejército turco y unidades de la inteligencia turca entraron en Siria a través del pueblo de Keklice, en dirección a Jarablus, tomando el control del municipio y expulsando al Daesh el mismo día.

Por su parte, el YPG/PKK intentaba llegar a Jarablus por el sur, pero fue detenido por el Ejército y la inteligencia turca a la altura del río Sajur, según Abu Bakr.

A continuación, Abu Bakr señala que el objetivo de la operación fue unir la línea fronteriza entre Jarablus y Azaz una vez liberada del Daesh, lo cual se consiguió en unos 10 días.

Tras esta fase, las fuerzas conjuntas de la operación militar procedieron a liberar el pueblo de Dabiq y a romper el asedio del Daesh sobre el pueblo de Marea.

Abu Bakr indica que el objetivo de la última fase de la operación fue liberar el municipio de Al Bab de Daesh y salvar a su población del yugo de la organización terrorista.

No obstante, Abu Bakr afirma que durante esta fase experimentaron las peores condiciones climatológicas de toda la operación con lluvia, niebla y mucho frío, además de la gran cantidad de minas terrestres y artefactos explosivos que el Daesh puso a su paso.

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“Perdimos a valiosos comandantes turcos y sirios”, lamenta Abu Bakr.

Desde 2016, Turquía ha adelantado tres exitosas operaciones antiterroristas a través de su frontera, en el norte de Siria: Escudo del Éufrates (2016), Rama de Olivo (2018) y Fuente de Paz (2019).

Las operaciones estuvieron en línea con el derecho de autodefensa del país derivado del derecho internacional, las decisiones del Consejo de Seguridad de la ONU, especialmente las 1624 (2005), 2170 (2014) y 2178 (2014), y según el derecho a la legítima defensa en virtud del Artículo 51 de la Carta de la ONU, respetando la integridad territorial de Siria.

El YPG/PKK controla gran parte del este del río Éufrates y un pequeño sector del noroeste en el norte de Siria. Luego de la intervención de las Fuerzas Armadas Turcas, el 9 de octubre de 2019, en la Operación Fuente de Paz, la organización perdió el control de los municipios de Tal Abiad y Ras al-Ayn, en el noreste de Siria, a lo largo de su frontera con Turquía.

*Traducido por Daniel Gallego.