El portavoz del Ministerio de Relaciones Exteriores de Turquía, Hami Aksoy, criticó este lunes la declaración del alto representante de política exterior de la Unión Europea (UE), Joseph Borrell, en la que “lamentaba la apertura de la costa del distrito de Varosha (Maras en turco) en la ciudad de Famagusta, situada en la República Turca del Norte de Chipre (TRNC).

Según Aksoy, esta declaración "reveló cuán desconectada está la UE de las realidades de la isla".

La isla Chipre es un país que ha experimentado un proceso de paz inconcluso durante los últimos años y está dividido en dos partes; el sur de Chipre está controlado por los grecochipriotas y al norte se encuentra la TRNC.

El distrito abandonado de Varosha se reabrió al público después de 46 años el pasado 8 de octubre por parte de las autoridades turcas que controlan la zona. Antes de esto, la entrada a la costa de Varosha estaba prohibida a cualquier persona, excepto al personal del Ejército turco estacionado en la TRNC.

Ver también: Presidente de Turquía: debe discutirse la solución de los dos Estados en Chipre

Chipre ha estado dividido en dos desde 1974, año en el que un golpe de Estado grecochipriota fue seguido de una ola de violencia contra la comunidad turca de la isla y Turquía tuvo que intervenir militarmente en la isla para garantizar la seguridad de los turcochipriotas como potencia garante.

Aksoy señaló que la UE se hace el de la vista gorda ante los deseos de los turcochipriotas, y agregó que “una solución justa, duradera y sostenible solo es posible si se basa en la voluntad de los dos pueblos que son los copropietarios de la isla. "

“Acostumbrada a ignorar la existencia y los derechos de los turcochipriotas, la UE ahora se atreve a descartar la voluntad del pueblo turcochipriota hacia una solución a la problemática en la isla”, afirmó Aksoy.

El portavoz turco señaló que la UE se comporta con estándares dobles respecto a Chipre ya que la administración grecochipriota recibió la membresía al bloque europeo a pesar de su rechazo al plan de unificación de la isla propuesto por la ONU en 2004, mientras que las promesas hechas a la parte turcochipriota han sido olvidadas hace mucho tiempo.

Aksoy señaló además que el modelo de solución federal con dos regiones se ha probado durante más de 50 años y está fallando.

"Si la UE desea contribuir a la solución de la problemática de Chipre, ante todo, debe reconocer la existencia y la voluntad del pueblo turcochipriota y cumplir sus compromisos asumidos en 2004", agregó el portavoz turco.

En 2004, la ONU dirigió un referéndum para que el pueblo chipriota decidiera acerca de la reunificación de la isla; este fue aprobado por la mayoría de los turcochipriotas, pero fue rechazado de manera abrumadora por los grecochipriotas.

El presidente de Turquía, Recep Tayyip Erdogan, pidió el domingo, durante una visita a la TRNC, una solución de dos estados independientes para la isla y señaló que habían “dos pueblos y dos estados separados en Chipre”.

El domingo la República Turca del Norte de Chipre celebró sus 37 años de existencia.

La isla de Chipre se adhirió a la UE desde el 2004 como estado de facto dividido y, a pesar de que todo el territorio de la isla hace parte de la unión, solo el área controlada por las autoridades grecochipriotas está bajo la legislación de la UE.

La isla ha visto un proceso de paz intermitente en los últimos años, incluida una iniciativa fallida de 2017 en Suiza, bajo los auspicios como países garantes de Turquía, Grecia y el Reino Unido.

*Camilo Hernández contribuyó a la redacción de esta nota.