El ministro de Relaciones Exteriores de Rusia, Serguéi Lavrov, afirmó que su país está preocupado por las intenciones de Estados Unidos de desplegar misiles de alcance corto e intermedio en Europa y la región del Asia-Pacífico.

Durante una rueda de prensa en Moscú tras una reunión con su homólogo surcoreano, Chung Eui-yong, Lavrov dijo que el despliegue de tales armas interrumpiría significativamente la estabilidad estratégica en la región.

Lavrov reiteró la propuesta del presidente Vladimir Putin a Estados Unidos y otros miembros de la OTAN “para declarar una contramoratoria sobre el despliegue de tales misiles en todas las regiones del mundo con medidas de verificación que permitan a los miembros de la OTAN asegurarse de que no existan tales sistemas en Rusia”.

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La propuesta incluye que las bases de defensa antimisiles de la OTAN en Rumanía y Polonia no puedan ser adaptadas para equipar misiles crucero.

Lavrov aseguró no haber discutido el tema con su homólogo surcoreano porque Seúl se opone al despliegue de misiles de alcance corto e intermedio en su territorio.

El 2 de agosto de 2019, EEUU puso fin a su participación en el Tratado Nuclear de Alcance Intermedio (INF), considerado como la columna vertebral de la seguridad europea en la era posterior a la Guerra Fría, después de que EEUU y Rusia lo firmaran en 1987.

El INF prohibía a ambos países poseer y probar misiles de lanzamiento terrestre con un alcance de 300-3.100 millas (482-4.988 kilómetros).

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Recientemente Lavrov había incrementado sus críticas a EEUU y otros países occidentales. Durante su intervención por videoconferencia en una reunión de los países vecinos de Afganistán, celebrada Teherán, Irán, Lavrov afirmó que las fuerzas estadounidenses y de la OTAN planeaban establecerse en países cercanos a Afganistán.

Lavrov también aseveró que hay terroristas que intentan infiltrarse desde Afganistán en los países fronterizos, bajo la apariencia de refugiados, y subrayó que se deben crear unas condiciones de vida dignas para que los afganos regresen gradualmente a su país. El canciller ruso se refirió a lo que definió como enormes costos financieros para establecer un sistema nacional de educación y salud en Afganistán, así como una infraestructura social y económica efectiva.

En este sentido, Lavrov dijo que los culpables de la actual situación en Afganistán son quienes deberían asumir la responsabilidad de discutir esos temas y buscar una solución.

*Traducido por Daniel Gallego.

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