Presidente de Italia cita al exjefe del Banco Central Europeo para formar un nuevo gobierno

El presidente de Italia, Sergio Mattarella, convocó al exdirector del Banco Central Europeo, Mario Draghi, a una reunión este miércoles después de subrayar la urgente necesidad de que los partidos políticos respalden la creación de un Gobierno de “alto perfil” capaz de dirigir al país a través de su emergencia sanitaria y económica.

En un discurso televisado transmitido este martes por la noche, Mattarella anunció que la primera ronda de negociaciones destinadas a forjar una nueva coalición gobernante había fracasado, lo que llevó al país a una profunda incertidumbre después del repentino colapso del Gobierno encabezado por el primer ministro Giuseppe Conte la semana pasada.

Mattarella se enfrenta ahora a la alternativa de recurrir a una figura institucional de alto perfil para liderar un nuevo gabinete o a la arriesgada elección de convocar elecciones anticipadas. Sin embargo, dijo que Italia no puede permitirse el lujo de entrar en una campaña electoral de meses justo mientras está luchando contra una segunda ola de la pandemia de coronavirus.

Luego hizo un llamado a todas las fuerzas políticas del Parlamento para que apoyen la creación urgente de lo que él definió como un gobierno apolítico de “alto perfil”.

La opción más probable es que Mattarella recurra al expresidente del BCE, que tiene un alto prestigio internacional y una sólida reputación por su papel crucial en el ahorro de la moneda única europea, para intentar formar un nuevo gabinete.

Draghi no ha comentado sobre los informes que lo apuntaban como un posible candidato para el cargo de primer ministro, pero es ampliamente considerado como uno de los principales candidatos para el puesto.

Mattarella, sin embargo, tendría que asegurarse de que el futuro primer ministro cuente con el respaldo total de las principales fuerzas parlamentarias antes de darle un mandato para tratar de liderar Italia en un momento tan difícil.

El presidente enfatizó que Italia se enfrenta a una doble emergencia ya que el brote de COVID-19 golpeó su ya frágil economía y la sumió en una dramática recesión.

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La crisis política fue provocada el mes pasado por el ex primer ministro Matteo Renzi, quien sacó a su pequeño partido Italia Viva de la coalición gobernante, despojando a Conte de su débil mayoría parlamentaria y obligándolo a renunciar.

Mattarella había dado a los partidos de centro izquierda de la antigua coalición de Conte hasta el final del martes para ver si podían forjar una nueva mayoría en el Parlamento, posiblemente con un nuevo mandato para Conte como primer ministro.

Pero los esfuerzos, liderados por el presidente de la Cámara Baja, Roberto Fico, fracasaron después de que las partes admitieran que no pudieron resolver sus diferencias sobre el manejo de la pandemia y otras políticas clave.

Si el segundo intento de improvisar un gobierno de coalición amplio, posiblemente encabezado por Draghi u otra figura no política, falla, entonces Mattarella tendría la única opción de disolver el Parlamento y convocar elecciones anticipadas, probablemente en junio.

*Daniela Mendoza contribuyó con la redacción de esta nota.