Las Naciones Unidas pidieron al gobierno de Australia proveer protección, agua, comida y otras necesidades básicas inmediatamente a 600 personas, quienes permanecen en un complejo de acomodamiento en el centro de procesamiento extraterritorial en la isla Manus.

“Nos preocupan los eventos registrados la última semana en el centro de procesamiento extraterritorial de Australia en la isla Manus, Papua Nueva Guinea, donde permanecen los refugiados luego de la decisión de Australia de cerrar el complejo y sacar a su personal”, dijo Rupert Colville, portavoz del alto comisionado de la ONU para los Derechos Humanos, durante una rueda de prensa en Ginebra.

“Nos preocupa seriamente el bienestar y la seguridad de los cerca de 600 hombres que permanecen en el complejo, y quienes tienen mucho temor de irse”, dijo Colville.

Colville señaló que todos los migrantes, incluyendo los refugiados, tienen derecho a un entorno seguro, a estándares de vida adecuados y a participar en el proceso de decisión sobre su futuro, y añadió que “la dignidad humana debe ser garantizada durante todo el proceso de búsqueda de asilo".

También hizo un llamado a los gobiernos de Australia y Papua Nueva Guinea a respetar los derechos humanos de los refugiados. “Reiteramos nuestras preocupaciones sobre los centros de procesamiento extraterritoriales de Australia, los cuales son insostenibles, inhumanos y van en contra de sus obligaciones en materia de derechos humanos. Pedimos al Gobierno de Australia transferir a los refugiados a su país para ser procesados allí”.

*Ahmed Fawzi Mostefai contribuyó con la redacción de esta nota