ESTAMBUL

Al menos cinco personas murieron por un terremoto de magnitud de 6.9 que sacudió Filipinas este martes 30 de septiembre, informó ABS-CBN News.

Un complejo deportivo se derrumbó en el norte de Cebú durante un partido de baloncesto, y se reportaron varias personas muertas y heridas.

Se informó que cuatro de las víctimas pertenecían al equipo de desastres que respondió al derrumbe del complejo.  Una de las víctimas era miembro de la Oficina de Protección contra Incendios y tres de la Guardia Costera Filipina, según el capitán de Policía Jan Ace Elcid Layug.

La quinta víctima fue un niño que quedó atrapado entre los escombros en otro lugar.

Según el Servicio Geológico de Estados Unidos (USGS), el epicentro del sismo, que se produjo a las 13:59 GMT de este martes, tuvo una profundidad de 10 kilómetros y se ubicó inicialmente en la región norte de Cebú.

Posteriormente, el USGS ajustó la magnitud de 7,0 en la escala de Richter a 6,9.

El Instituto Filipino de Vulcanología y Sismología (Phivolcs) emitió una alerta de tsunami, que posteriormente se levantó.

Se informó del derrumbe de la iglesia de San Pedro y San Pablo en la isla de Bantayan durante el terremoto.

Un edificio de una cadena de comida rápida también se derrumbó parcialmente en Bogo, en la región de Cebú.

 Las clases en las escuelas se suspendieron el miércoles en varias zonas de Cebú, incluyendo Lapu-Lapu, Mandaue, Talisay, Minglanilla, Consolacion y Liloan.

Los bomberos de Mandaue contuvieron una fuga de amoníaco en una planta de bebidas tras el temblor.

Se reportaron víctimas en el municipio de San Remigio, en Cebú, que declaró el estado de calamidad tras los daños generalizados en la zona.

*Aamir Latif y Aicha Sandoval contribuyeron con el informe.