MOSCÚ

El portavoz del Kremlin, Dimitri Peskov, afirmó este martes que la destrucción de la presa de Kajovka, en el sureste de Ucrania, fue un acto “deliberado de sabotaje” llevado a cabo por Kiev.

Durante una rueda de prensa en Moscú, Peskov rechazó enérgicamente las acusaciones de que Rusia destruyó con explosivos la presa, provocando inundaciones a lo largo del rio Dniéper, y señaló que Kiev debe asumir toda la responsabilidad por las consecuencias, dijo Peskov en una rueda de prensa en Moscú.

“El presidente ha recibido informes del Ministerio de Defensa y otras agencias sobre lo que está sucediendo alrededor de la central hidroeléctrica de Kajovka”, recalcó Peskov y aseguró que “podemos afirmar, inequívocamente, que estamos hablando de un sabotaje deliberado por parte de Ucrania”.

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Peskov argumentó que Kiev llevó a cabo el ataque debido a al fracaso de su tan esperada contraofensiva que, según el portavoz, se está “asfixiando” y enfatizó que uno de sus objetivos es privar a Crimea del agua, la cual es suministrada a la península a través del embalse de Kajovka.

La presa, de 30 metros de altura y 3,2 km de largo, se construyó en 1956 sobre el río Dniéper como parte de la central hidroeléctrica de Kajovka. También posee un embalse de 18 kilómetros cuadrados de capacidad.

*Traducido por Daniel Gallego.