Centenares de personas salieron este domingo 1 de agosto a las calles de Berlín, Alemania, para protestar contra las medidas del Gobierno para prevenir la propagación de la COVID-19.

En algunas partes de la capital alemana se registraron enfrentamientos entre los manifestantes y los policías. Las autoridades usaron gases lacrimógenos y cañones de agua para dispersar a los manifestantes. La Policía, que tenía más de 2.000 agentes de guardia, realizó varios arrestos.

Se bloquearon las entradas al monumento de la Columna de la Victoria y no se permitió a los manifestantes dirigirse hacia el Bundestag, el Parlamento federal y la Puerta de Brandeburgo.

Los jueces de un tribunal administrativo habían prohibido las protestas del fin de semana en medio de temores de un aumento de los contagios por coronavirus provocados por la variante delta del virus.

El tribunal manifestó que temía que los participantes incumplieran las reglas sobre el uso de máscaras médicas y el distanciamiento social a medida que aumentan las cifras de infección por COVID-19 en Alemania.

El jueves, Alemania registró su mayor número de casos diarios de coronavirus durante casi dos meses. La variante delta se ha convertido en la cepa dominante en el país.

Alemania alivió muchas de sus restricciones de coronavirus en mayo, pero muchas actividades, como salir a cenar o quedarse en un hotel, requieren prueba de vacunación o una prueba de coronavirus negativa reciente.

El movimiento Querdenker (Pensadores laterales) se ha convertido en la voz más fuerte contra las restricciones del coronavirus en Alemania y, a menudo, ha atraído a miles de seguidores a sus manifestaciones.

Ver también: Aumentan las protestas contra el pase de salud anti-COVID-19 en Francia.

*Juan Felipe Vélez Rojas contribuyó con la redacción de esta nota.