Las ventas minoristas en Brasil cayeron un 31,8% en abril, en comparación con el mismo mes del año pasado, según una encuesta realizada por la empresa Serasa Experian.

El medio Agencia Brasil resaltó que se trata de la mayor caída de las ventas al detal en el país suramericano desde 2002, cuando ese tipo de ventas se redujo en un 16,5%.

Economistas de Serasa resaltaron que la caída en la demanda del mercado minorista está directamente relacionada con la adopción de las medidas de distanciamiento social adoptadas para disminuir los contagios de COVID-19. 

“Con los establecimientos comerciales a puertas cerradas, los propietarios de tiendas vieron aumentar sus inventarios y disminuir la demanda de productos”, dijo Luiz Rabi, economista de Serasa. El experto añadió que la inestabilidad laboral también hizo que las personas pospusieran sus decisiones de compra.

La pesquisa también encontró que, en los primeros cuatro meses del año, la actividad minorista disminuyó un 10.1% en relación con el período de enero a abril de 2019.

Entre los sectores más afectados en abril, se encuentra el de electrodomésticos y electrónicos, con una caída del 39.9% en comparación con el mismo mes del año pasado. La venta minorista de ropa y calzado registró una reducción de 39.6% en las ventas; vehículos, motocicletas y autopartes, 33.1%; y material de construcción, 32.1%.

A su vez el sector de los supermercados, alimentos y bebidas se vio ligeramente menos afectado, con una reducción del 24,3% en el movimiento de abril. Los establecimientos que venden combustibles y lubricantes cayeron un 19,3% en el mes.

Brasil ha sido el país más afectado por el COVID-19 en América Latina. El país suramericano ha registrado 560,737 contagios de coronavirus y 31,417 muertes por causa de la enfermedad, según las cifras registradas en la plataforma Worldometer.

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