El presidente saliente de Estados Unidos, Donald Trump, partirá de la Casa Blanca por última vez en la mañana de la inauguración de la presidencia de Joe Biden, pocas horas antes de que el presidente electo tome juramento el 20 de enero, según un informe publicado el viernes.

Trump había anunciado previamente que no asistiría a la ceremonia de investidura de Biden, rompiendo con un precedente que se remonta a casi 200 años. Pero el periódico The Washington Post informó que el republicano no solo no asistirá, sino que abandonará la mansión ejecutiva antes de que se entreguen formalmente las riendas del poder.

Normalmente, los presidentes saliente y entrante viajan juntos al Capitolio para participar en la ceremonia de investidura de su sucesor, en una exhibición que encarna la transferencia pacífica de poder en Estados Unidos. La tradición ha estado vigente "con pocas excepciones" desde 1837, según el Comité Conjunto del Congreso sobre Ceremonias de Investidura.

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Se espera que el vicepresidente saliente Mike Pence asista a la ceremonia.

Ante la ausencia de Trump en la ceremonia de investidura, Biden agradeció al republicano por anunciar que no asistirá a la inauguración de su mandato.

"Es una de las pocas cosas que él y yo hemos acordado. Es bueno que no se presente", manifestó el presidente electo días previos y dijo que Trump era una "vergüenza" y no era apto para liderar la nación.

"Superó incluso mis peores ideas sobre él. Ha sido una vergüenza para el país, nos avergonzó en todo el mundo. No es digno de ocupar ese cargo", expresó Biden.

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Trump se ha estado preparando para un segundo juicio político (impeachment) en el Senado, juicio que lo convirtió en el primer presidente de EEUU en ser enjuiciado políticamente dos veces durante su mandato.

Al republicano se le acusa de "incitación a la insurrección” por incitar la violencia contra el Congreso de EEUU.

Poco antes de que el Capitolio fuera asaltado por varios simpatizantes de Trump, el mandatario había implorado a sus seguidores que "lucharan como el infierno" para "detener el robo", refiriéndose a sus repetidas afirmaciones, sin pruebas, con respecto a que las elecciones del 3 de noviembre le fueron robadas mediante un fraude electoral generalizado.

En total, cinco personas murieron como resultado de los incidentes presentados el miércoles 6 de enero en el Capitolio, cuando simpatizantes de Trump invadieron el edificio federal y se enfrentaron a la policía. Entre los muertos se encontraba el oficial de policía del Capitolio, Brian Sicknick.​​​​​​​

*Juan Felipe Vélez Rojas contribuyó con la redacción de esta nota.