Turquía fue la nación que rechazó más enérgica y vehementemente al intento de golpe militar en Armenia.

El jefe del Estado Mayor de Armenia, Onik Gasparyan, y altos mandos del Ejército emitieron el jueves un comunicado instando al primer ministro, Nikol Pashinyan, a dimitir.

El líder armenio describió el movimiento como un intento de golpe de Estado, anunció que destituyó a Gasparyan y llamó a sus partidarios a las calles.

Rusia aseguró que es un tema de asuntos internos

Rusia, conocida por su cercanía a Armenia, declaró que "seguían con preocupación los acontecimientos", pero que "lo que sucede son asuntos internos de Armenia".

En su reunión con el ministro de Relaciones Internacionales armenio, Ara Ayvazyan, el canciller ruso, Sergei Lavrov, dijo que califican los acontecimientos como "asuntos internos de Armenia" y que esperan que la situación se resuelva pacíficamente.

Más tarde, el presidente ruso, Vladimir Putin, habló con Pashinyan por teléfono y aseguró que "está a favor de mantener la paz y el orden en Armenia para resolver la situación dentro del marco de la ley”.

Al evitar cualquier mensaje de condena, Moscú se limitó a pedir moderación de las partes.

Turquía condenó el intento de golpe

Luego de las declaraciones de Rusia, Turquía fue la primera en condenar los acontecimientos en Ereván.

"Condenamos todos los golpes militares o intentos de golpe, sin importar dónde tengan lugar en todo el mundo. Por lo tanto, condenamos enérgicamente este intento de golpe de Estado en Armenia", dijo el ministro de Relaciones Exteriores turco, Mevlut Cavusoglu.

La gente de un país tiene derecho a criticar a sus gobiernos o exigir su renuncia, señaló Cavusoglu, pero aclaró que “es inaceptable que un Ejército pida la renuncia de un Gobierno electo”.

“Es por eso que condenamos enérgicamente este llamado (del Ejército) en Armenia una vez", agregó, al mostrar la actitud fuerte y de principios de Turquía.

Por su parte, el portavoz presidencial, Ibrahim Kalin, también condenó el intento de golpe al subrayar que los levantamientos militares siempre han interrumpido los procesos democráticos y causado el caos.

“Esperamos que la situación en Armenia vuelva a la normalidad de inmediato”, agregó.

El Jefe de Comunicaciones de la Presidencia de Turquía, Fahrettin Altun, aseguró que el país “está profundamente preocupado por los últimos acontecimientos en Armenia”.

“Consideramos estos acontecimientos como un intento de golpe de Estados y lo condenamos de una manera neta", enfatizó.

El portavoz del partido gobernante Justicia y Desarrollo (AKP), Omer Celik, señaló: "Estamos en contra de todos los intentos de golpe, como siempre" y agregó Turquía no quiere que las situaciones desestabilizadoras aumenten en la región.

“El intento de golpe de Estado en Armenia tendría consecuencias que provocarían inestabilidad regional”, aseguró.

La UE llamó a la calma

El alto representante de la Unión Europea (UE) para Asuntos Exteriores y Política de Seguridad, Josep Borrell, pidió a todas las partes en Armenia que se abstengan de acciones que escalen la tensión y que mantengan la calma.

En un comunicado escrito, el funcionario señaló que las diferencias políticas deben resolverse de forma pacífica y en estricto apego a los principios y procesos de la democracia parlamentaria.

Borrell enfatizó en la importancia de proteger la democracia y el orden constitucional del país.

"Las fuerzas armadas deben mantener su neutralidad en asuntos políticos y estar bajo el control civil", agregó.

La OTAN se pronunció

La portavoz de la OTAN, Oana Lungescu, aseguró que la alianza sigue de cerca los acontecimientos en Armenia y subrayó que "las diferencias políticas deben resolverse por medios pacíficos y de acuerdo con la democracia en línea con la Constitución armenia".

Lungescu hizo hincapié en la importancia de evitar declaraciones y acciones que aumenten aún más la tensión.

Irán pidió moderación

El portavoz del Ministerio de Relaciones Exteriores de Irán, Said Khatibzadeh, aseguró que Teherán sigue de cerca los acontecimientos en su vecina Armenia y se limitó a llamar a todas las partes a "mantenerse alejados de la violencia" y la "moderación".

EEUU llamó al Ejército a no interferir en la política

El portavoz del portavoz del Departamento de Estado de Estados Unidos, Ned Price, indicó que Washington está monitoreando de cerca la situación e instó a todas las partes a actuar con moderación para evitar acciones violentas.

"Recordamos a todas las partes el principio democrático fundamental de que las fuerzas armadas del Estado no deben intervenir en la política interna", indicó Price a los periodistas y agregó que Estados Unidos ha sido un firme partidario del desarrollo de procesos e instituciones democráticas en Armenia”, dijo.

"Seguimos apoyando la democracia de Armenia y su soberanía, e instamos a sus líderes a resolver sus diferencias de manera pacífica, respetando el Estado de derecho, la democracia de los armenios y sus instituciones", señaló el funcionario estadounidense.

Al señalar que hay algunos criterios para que EEUU defina estos acontecimientos como "golpe de Estado", Price dijo que en este momento no se califican como tal.

*Aicha Sandoval Alaguna contribuyó con la redacción de esta nota.