Tres periódicos judíos británicos dijeron este jueves que un gobierno laborista encabezado por Jeremy Corbyn sería una “amenaza existencial” para los judíos del país.

Una pieza editorial conjunta publicada por The Jewish Chronicle, Jewish News y Jewish Telegraph apareció en la portada de los tres diarios bajo el título “Nos mantenemos unidos”, que describió al Partido Laborista como el "segundo hogar natural” de la comunidad judía británica, pero dijo que el partido ha visto “cómo se corroen sus valores e integridad por el odio de Corbyn hacía Israel y los judíos”.

“La mancha de vergüenza y antisemitismo ha corrido por la oposición de su majestad desde que Jeremy Corbyn se convirtió en el líder [del partido] en 2015”.

Acusando al partido de convertirse en “institucionalmente racista”, el editorial señaló “las grandes preocupaciones suscitadas en la comunidad judía”.

“Con el gobierno en caos por el brexit, existe un peligro claro de que un hombre con ceguera hacia las preocupaciones de la comunidad judía, un hombre que tiene un problema viendo que la retórica de odio contra Israel puede convertirse en antisemitismo fácilmente, este podría ser nuestro próximo primer ministro”, agregó.

En diálogo con el periódico The Guardian, un portavoz del Partido Laborista rechazó los señalamientos, afirmando que un gobierno laborista “no representa ningún tipo de amenaza a los judíos”.

Dijo: “entendemos las preocupaciones de la comunidad judía y buscamos actuar con organizaciones comunales para crear confianza en nuestro partido. Sabemos que queda mucho trabajo por hacer”.

La semana pasada, Corbyn dijo que no tolerará "el antisemitismo en ningún lugar de nuestra sociedad ni en nuestro partido”.

El último señalamiento de antisemitismo contra el Partido Laborista se dio después de que este se negara a aceptar la definición de “antisemitismo” de la Alianza Internacional para la Memoria del Holocausto, el cual equipara las críticas al Estado de Israel como antisemitismo.

El partido señaló que está preocupado sobre la creación de un código de conducta que podría “ser usado para negar a los palestinos, incluso los que son ciudadanos israelíes, los derechos y las libertades para describir la discriminación y las injusticias que atraviesan en el lenguaje que consideren apropiado”, afirmó The Guardian.

*Ahmed Fawzi Mostefai contribuyó con la redacción de esta nota.