ESTAMBUL

El primer ministro de Reino Unido, Keir Starmer, defendió este miércoles los intereses económicos del país en respuesta a la propuesta de Trump de imponer un aranceles del 25% a las importaciones de acero y aluminio.

Durante las preguntas al primer ministro en la Cámara de los Comunes, la legisladora norirlandesa Sorcha Eastwood presionó a Starmer sobre si apoyaría a los trabajadores siderúrgicos británicos mientras Estados Unidos se prepara para imponer los aranceles.

“Estados Unidos y Reino Unido comparten una fuerte relación comercial. Invertimos enormemente en las economías de cada uno y seguiremos trabajando con Donald Trump para aumentar el crecimiento y crear empleos”, dijo Starmer y agregó que “siempre actuaremos en el mejor interés de las empresas y los trabajadores de todo Reino Unido, incluida Irlanda del Norte”.

El líder liberal demócrata Ed Davey invocó la alianza histórica formada entre Gran Bretaña, Canadá y la ONU durante la Segunda Guerra Mundial. “80 años después, el presidente Trump parece haber olvidado todo esto”, dijo Davey, argumentando que los aranceles “afectarán más a Canadá y también afectarán los empleos y el costo de vida en Reino Unido”.

Davey instó a Starmer a considerar medidas de represalia y le preguntó si “prepararía un plan de aranceles a cambio, empezando por los aranceles a los coches eléctricos estadounidenses”.

Starmer reconoció la importancia de los vínculos de larga data de Gran Bretaña con Estados Unidos y la importancia de la industria británica. “El líder liberal demócrata tiene razón al hacer referencia a nuestra historia y a los 80 años de historia, esa es una de las razones por las que tenemos una relación especial”.

Sobre los aranceles, Starmer reafirmó su compromiso con los trabajadores siderúrgicos de Reino Unido. “El acero británico es una parte esencial de nuestro corazón y no abandonaremos a nuestra fuerza laboral”.

Starmer afirmó que su Gobierno está llevando a cabo una “evaluación sensata de las implicaciones” de los aranceles, pero subrayó que “siempre pondría nuestro interés nacional en primer lugar y a los trabajadores siderúrgicos en primer lugar”.

*Traducido por Daniel Gallego.