Cinco civiles murieron y otros cinco resultaron heridos en ataques aéreos nocturnos en la provincia de Idlib, en el noroeste de Siria, según fuentes de la agencia de defensa civil Cascos Blancos.

Los ataques aéreos que continuaron hasta la mañana del jueves cobraron la vida de cuatro niños y su padre en la aldea de al-Faqie. La madre fue rescatada de los escombros, dijeron las fuentes.

Los ataques que tuvieron lugar al amanecer también se dirigieron a las aldeas de Frikeh, Sheikh Mustafa, Al Hamidiyah, Hbit y las afueras de la ciudad de Kafr Rumah.

Según Cascos Blancos los seis aviones de guerra eran naves de combate rusas que despegaron de la base aérea de Khmeimim, en la provincia de Latakia, al oeste del país.

Se estima que los ataques llevados a cabo por el régimen sirio y los grupos respaldados por Irán en la zona de desescalada de Idlib han matado a al menos 152 civiles, y han herido a más de 445 personas desde principios de 2019.

En septiembre de 2018, Turquía y Rusia acordaron convertir a Idlib en una zona desmilitarizada luego de una reunión entre el presidente turco, Recep Tayyip Erdogan, y su homólogo ruso, Vladimir Putin, en la ciudad costera rusa de Sochi.

Ankara y Moscú firmaron un memorando de entendimiento que pide la estabilización de la situación en la zona de desescalada de Idlib, en la que están prohibidos los actos de agresión.

Siria ha estado atrapada en una guerra civil desde principios de 2011, cuando el régimen de Bashar al-Assad tomó medidas enérgicas contra las protestas en favor de la democracia.

Desde entonces, cientos de miles de personas han muerto y más de 10 millones han sido desplazadas, según funcionarios de la ONU.

*Carolina Zúñiga contribuyó con la redacción de esta nota.