El primer vicepresidente de Irán, Eshaq Jahangiri, aseguró que “las expectativas del pueblo iraní se deben hacer cumplir”.

Durante un discurso que dio en un programa conmemorativo, organizado con motivo del primer aniversario de la muerte del antiguo presidente Akbar Hashemí Rafsanyaní, el primer viceministro hizo una valoración de las manifestaciones que comenzaron en Irán el 28 de diciembre de 2017.

“Nuestro pueblo experimenta problemas económicos, políticos y culturales. Las discusiones, preocupaciones y objeciones son por el futuro de Irán”, dijo Yihangir.

“Tenemos que mantener abiertos los canales de comunicación para que las objeciones no se conviertan en violencia y odio. Este asunto daña la unidad del país. El diálogo es el camino para resolver los problemas del país”, añadió Yihangir.

El vicepresidente recordó que Rafanyaní era un presidente que entendía los problemas de la gente, y señaló que durante su mandato se tuvieron las mejores relaciones con los países árabes.

Las manifestaciones en la ciudad de Mashhad, el 28 de diciembre del año pasado, empezaron para protestar por el elevado costo de la vida, el desempleo y la corrupción, pero en breve se convirtieron en protestas en contra del régimen.

En las manifestaciones, que se han extendido a las ciudades de Teherán, Kirmanshah, Senendech, Zenyan, Shiraz, Qum, Ahwaz, Zahidan, Erak y Hurrem Abad, han muerto más de 20 personas, mientras que más de 1.000 manifestantes han sido detenidos.

Rafsanyaní, quien ejerció como presidente del país por dos periodos, entre 1989 y 1997, falleció el 8 de enero de 2017.

*Daniel Gallego contribuyó con la redacción de esta nota