Stephanie Grisham, asistente y portavoz de la primera dama de Estados Unidos, Melania Trump, fue designada este martes como el rostro público de la Casa Blanca.

Además de convertirse en la secretaria de prensa, Grisham también asumirá el papel de la dirección de comunicaciones de la Casa Blanca.

La primera dama anunció formalmente el nombramiento en una publicación de Twitter, asegurando que ella y el presidente Donald Trump “no pueden pensar en una mejor persona para servir a la administración y al país”.

“Emocionada de tener a Stephanie trabajando para ambos lados de la @CasaBlanca”, agregó Melania, sugiriendo que, al parecer, seguiría asumiendo sus cargos en el Ala Este, al tiempo que se desempeña como portavoz de la Casa Blanca.

Grisham ha servido en la administración de Trump desde 2015, llegando a convertirse en una de las asesoras más cercanas de Melania.

Reemplazará a la portavoz saliente Sarah Huckabee Sanders, cuya renuncia fue anunciada la semana pasada.

Sanders se convirtió en la segunda portavoz más importante durante la administración de Trump. Asumió el puesto después de que el antiguo portavoz, Sean Spicer, renunció seis meses después de que Trump se posesionó.

Sanders dará por terminadas sus funciones en la Casa Blanca a finales de este mes.

*Daniela Mendoza contribuyó con la redacción de esta nota.