En Siria tanto el régimen de Bashar al Assad como los terroristas extranjeros apoyados por Irán están desocupando las bases militares en las ciudades de Damasco y Homs, a raíz del anuncio sobre un posible ataque estadounidense.

El régimen sirio ha estado atento a una respuesta estadounidense después de un ataque químico en Duma, en la región de Guta Oriental, en Damasco, atribuido al régimen y el cual ha sido rechazado por la comunidad internacional.

El régimen cambió la ubicación de su personal y de los equipos que se encontraban en el área de Damasco y en las bases militares de Homs.

Algunos de los equipos militares en estas bases fueron enviados al aeropuerto civil de Damasco. También se distribuyeron rampas de misiles y municiones en las áreas rurales con riesgo de ataque.

Por su parte, los terroristas extranjeros, apoyados por Irán y ubicados en las bases de Al-Sin y Dumejr, en la región noreste, se movilizan hacia la frontera con El Líbano.

Los combatientes terroristas extranjeros a favor del régimen se dirigen a la región de Dera y a la frontera de El Líbano, mientras el personal y los equipos militares ubicados en la base aérea T4, en Homs, fueron transportados a Al-Nayrab, en el centro de Alepo, y a Kuveyris, al este.

El régimen de Assad, que también está intentando proteger las bases aéreas contra la posible operación militar de los EEUU y de sus aliados, envió aviones activos IL-76 y tipo SU al aeropuerto militar de Hama y a la base aérea de Khmeimim, los cuales son utilizados por Rusia.

En la noche del 7 de abril el régimen sirio realizó un ataque con armas químicas contra los asentamientos civiles en el distrito de Duma, en Guta Oriental, el último punto bajo control de los opositores, en el cual perdieron la vida 78 civiles.

Estados Unidos pidió que el Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas (CSNU) investigara la masacre y determinara sus responsabilidades, pero Rusia vetó la solicitud.

El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, dijo que todas las posibilidades están sobre la mesa, incluida la opción militar contra el régimen de Assad, y que si hay una parte de responsabilidad en el ataque del presidente ruso, Vladimir Putin, este "pagará el precio".

Trump dijo este miércoles, a través de su cuenta de Twitter: "Rusia promete derribar todos los misiles que se disparen contra Siria. ¡Prepárate, Rusia, porque llegarán, buenos, nuevos e 'inteligentes'! ¡No deberían ser socios de un animal asesino con gas que mata a su pueblo y lo disfruta!".

Horas más tarde, a través de otro tuit, Trump dijo que “nunca se ha dicho cuándo se llevará a cabo un ataque en Siria. ¡Podría ser muy pronto o no tan pronto! En cualquier caso, Estados Unidos, bajo mi administración, ha hecho un gran trabajo liberando a la región de ISIS [otro nombre con el que se conoce a Daesh]. ¿Dónde está nuestro "Gracias América"?”.

El secretario de Defensa de EEUU, Jim Mattis, declaró que la inteligencia estadounidense continúa analizando el ataque químico de Siria, en la ciudad de Duma, y que las opciones militares estaban listas para responder al ataque.

*Carolina Zúñiga contribuyó a la redacción de esta nota.