Siete muertos y casi 150 heridos deja noche de protestas por el asesinato de un abogado en Bogotá

Al menos 26 protestas ocurridas en la noche del miércoles en Bogotá, para rechazar el asesinato del abogado Javier Ordóñez en manos de uniformados de la Policía, dejaron siete civiles muertos (incluido un menor de 17 años) por arma de fuego y 55 heridos, así como 93 policías lesionados.

A primera hora del jueves, el ministro de Defensa Carlos Holmes Trujillo y el director (e) de la Policía Nacional, general Gustavo Moreno, dieron un balance de la situación, a la que calificaron como “vandálica y violenta”.

Según Moreno, además de los fallecidos y lesionados, los disturbios dejaron daños en 56 Comandos de Acción Inmediata (CAI) de la Policía (de los cuales 22 fueron incendiados), tres estaciones de policía, 77 vehículos de TransMilenio (37 incendiados), 49 buses del Sistema Integrado de Transporte Público (5 incendiados), así como 25 motocicletas y 9 vehículos de Policía averiados.

Igualmente, el oficial informó que 70 personas fueron capturadas por “daño en bienes públicos y afectación contra servidores públicos”.

El ministro Trujillo calificó la jornada como un “acto masivo de vandalismo y violencia” y dijo que las autoridades están trabajando para “individualizar” a los responsables de lo ocurrido.

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Aunque señaló que lo ocurrido “enluta a la sociedad por la pérdida de vidas humanas y afectaciones a los bienes públicos” y “reiteró el dolor” por la muerte de Javier Ordóñez, el ministro de Defensa aseguró que la “política del Gobierno es de cero tolerancia con la violación a la ley y con cualquier quebrantamiento de las leyes”.

También recalcó que el Gobierno Nacional continuará prestando toda la colaboración a las autoridades para el avance en la investigaciones, para que “se individualicen” los dos uniformados responsables de la muerte de Ordóñez y se impongan las sanciones que correspondan. Trujillo rechazó la “estigmatización que pretende hacérsele” a la institución.

Además, recalcó que se han logrado identificar en redes sociales “perfiles con publicaciones que promovieron la violencia contra la Institución, contra funcionarios de la Policía, así como actos de justicia por mano propia”, hechos que están tipificados en el Código Penal, por lo que se están ofreciendo recompensas de hasta COP 50 millones (o más) por información para “individualizar” a quienes “hayan participado en hechos violentos y vandálicos”.

“La capacidad de la fuerza pública está dispuesta para controlar cualquier intento de vandalismo y violencia”, reiteró Trujillo.

El ministro insistió en que dichas “expresiones o campañas” tendrían un origen internacional.

Las protestas iniciaron luego de que se divulgara en redes sociales un video en el que se observa el momento del abuso de dos agentes de la Policía sobre Ordóñez, un abogado de 46 años.

El video muestra que los dos policías le aplicaron a Ordóñez varias descargas eléctricas con una pistola ‘taser’. Testigos del hecho afirmaron que el abogado fue trasladado al CAI de Villa Luz, desde donde salió gravemente herido a un centro de salud en el que falleció.

La alcaldesa de Bogotá, Claudia López, envió sus condolencias a familiares y amigos de los fallecidos y heridos, pero reiteró el llamado a la ciudadanía a “mantener la serenidad y no usar violencia” y a la “Policía a ceñirse al ejercicio legítimo de sus funciones”.

“Hoy es un día que duele por donde se le mire. Mis condolencias a familiares y amigos de quienes murieron o están heridos. Destruir a Bogotá no arreglará la Policía. Destruirnos no arreglará nada. Concentrémonos en lograr justicia y reforma estructural a los cuerpos de seguridad”, escribió la mandataria en su cuenta de Twitter.