MOSCÚ

El ministro de Asuntos Exteriores ruso, Sergey Lavrov, instó a investigar las acusaciones de Israel de que algunos miembros del personal de la agencia de ayuda de la ONU para los refugiados palestinos (UNRWA) colaboraron con Hamás en los ataques del 7 de octubre antes de suspender los fondos para la organización humanitaria.

En una conferencia de prensa en Moscú tras una reunión con su homólogo de Gambia, Mamadou Tangara, Lavrov dijo que lo que está sucediendo en Gaza, donde los ataques israelíes han matado a más de 26.000 personas, es un “castigo colectivo prohibido por el derecho internacional humanitario”.

“Si existen tales acusaciones, tenemos que aclararlas. Desde el principio condenamos el ataque terrorista del 7 de octubre y dijimos claramente que es necesario combatir el terrorismo en cualquiera de sus manifestaciones con medios que no violen las normas internacionales”, subrayó.

Lavrov dijo que si se lleva a cabo una investigación se conocerán los hechos y se sabrá si las acusaciones de Israel tienen algún fundamento.

“Pero si se cancela la investigación y, en cambio, se castiga colectivamente a la UNRWA y a aquellos a quienes presta asistencia, entonces creo que es una decisión equivocada. Espero que la dirección de la ONU plantee estas cuestiones en contactos con representantes israelíes”, enfatizó.

Varios países, entre ellos Estados Unidos, Reino Unido, Alemania, Francia, Austria y Japón, han suspendido los fondos para la agencia creada en 1949 para atender a los refugiados palestinos en Gaza, Cisjordania, Jordania, Siria y el Líbano.

Participa en la educación primaria y vocacional, la atención primaria de salud, los servicios sociales y de socorro, la mejora de infraestructuras y campamentos y la respuesta a emergencias.

La agencia de la ONU dice que abrió una investigación sobre las acusaciones y cortó los vínculos con esos miembros del personal.

*Traducido por Daniel Gallego.