El juez del Tribunal Supremo de España, Pablo Llarena, reactivó una nueva orden de captura europea e internacional contra el expresidente de la Generalitat catalana, Carles Puigdemont. 

Cabe recordar que Puigdemont escapó a Bélgica para evitar ser condenado en su país por los delitos de sedición y malversación en el marco del fallido proceso de emancipación catalán que se llevó a cabo en octubre del 2017.

La decisión de Llarena se conoció horas después de que el Supremo español condenara a nueve líderes independentistas catalanes a penas de entre nueve y 13 años de prisión por los delitos de sedición. 

Entre ellos está el exvicepresidente del gobierno regional catalán (Generalitat), Oriol Junqueras, quien enfrentará una condena de 13 años de prisión y 13 de inhabilitación por el delito de sedición, junto con el de malversación de fondos públicos; y los exconsejeros Raül Romeva, Jordi Turull y Dolors Bassa, quienes fueron penados a 12 años de cárcel y 12 de inhabilitación absoluta.

Bajo la administración de Puigdemont, el Ejecutivo catalán realizó un referendo separatista el 1 de octubre del 2017, acto que fue declarado ilegal por el Tribunal Constitucional de España.

El 27 del mismo mes el Legislativo catalán declaró unilateralmente la independencia de Cataluña, por lo que Madrid decidió suspender el autogobierno, tomar las riendas de la región autonómica y convocar elecciones.

Por este hecho, tanto Puigdemont como otros miembros del Gobierno catalán fueron acusados de los delitos de rebelión (que implica penas de hasta 30 años) y malversación de fondos.