En un discurso televisado este viernes, la primera ministra de Nueva Zelanda, Jacinda Ardern, pidió a los usuarios de redes sociales que no compartan el video de Facebook Live donde un hombre aparece disparando contra decenas de personas en dos mezquitas de la ciudad de Christchurch.

Ardern entregó un nuevo balance en el que aseguró que Brenton Tarrant, un australiano de 28 años que no vivía en esa localidad, utilizó cinco armas, tres semiautomáticas y dos de pequeño calibre, para asesinar a creyentes en las mezquitas de Al Noor y Linwood.

Además, Tarrant tenía una licencia para portarlas que fue adquirida en noviembre de 2017, comentó Ardern.

Ante estos hechos, la funcionaria señaló que va a abrir el debate para el control de armas en Nueva Zelanda. “Les puedo decir una cosa en este momento: nuestras leyes sobre armas van a cambiar”.

El número de muertos por el ataque terrorista es de 49, según funcionarios del hospital local, pero hay 12 heridos de gravedad por lo que la cifra de fallecidos puede aumentar.

Asimismo, 42 personas resultaron heridas, dijo Karalyn van Deursen, directora ejecutiva de comunicaciones del Hospital Christchurch, a la Agencia Anadolu, quien habló en la mañana del sábado, hora local.

Entre los muertos se encuentran una niña de 5 años y su padre, quienes fueron perseguidos por el hombre armado y fusilados, informó la radio local de Nueva Zelanda.

Los momentos de la masacre, que fue difundida en vivo a través de Facebook, sugieren un enfoque sistemático y metódico por parte de los hombres armados para matar a decenas de fieles pacíficos reunidos en las mezquitas el viernes, el día santo de los musulmanes.

Tres sospechosos, dos hombres y una mujer, han sido detenidos hasta el momento en relación con las masacres.

En pocas horas, serán llevados a la corte distrital de Christchurch, por lo que la policía anunció en un comunicado que cerrará el recinto por el alto riesgo de seguridad.

*Maria Paula Triviño contribuyó con la redacción de esta nota.