Primer ministro designado reitera su política exterior de "Irak primero"

El primer ministro designado de Irak, Adnan al-Zurfi, reiteró que su gobierno adoptará una política exterior basada en el principio de "Irak primero".

A través de su perfil en Twitter, Zurfi aseguró que su gobierno trabajará por mantener a Irak alejado de las disputas regionales e internacionales que convierten al pais en un escenario para "saldar cuentas".

Zurfi aseguró que los "altos intereses de Irak" serán la "brújula" que delimitará la dirección de sus políticas.

El primer ministro designado afirmó que trabajarán por "abrirse a todos los países vecinos y regionales y en general a la comunidad internacional sin violar las condiciones y requerimientos de proteger la independencia de Irak y su soberanía".

Por otra parte, la Coalición al-Fateh y la Coalición del Estado de Derecho, liderada por el ex primer ministro Nuri al-Maliki, continúan oponiéndose a Zurfi.

Estos grupos políticos alegan que el presidente de Irak, Barham Salih, encargó la formación de gobierno a Zurfi a petición de Estados Unidos.

Por su parte, Zurfi rechaza esta acusación. "Soy iraquí, no soy el candidato de Estados Unidos", asegura.

Irak se ha visto envuelto en protestas masivas desde el 1 de octubre de 2019 en la capital, Bagdad, debido a las malas condiciones de vida y la corrupción, y en poco tiempo se extendieron a las capitales de las provincias sureñas del país árabe.

Luego de una pausa de una semana, los manifestantes volvieron a las calles el 25 del mismo mes, obligando a renunciar al ex primer ministro, Adel Abdul-Mahdi, el 29 de noviembre.

El presidente iraquí, Barham Salih, dio la orden de formar gobierno al político independiente chiíta Muhammad Tawfiq Allawi el 1 de febrero.

Desde entonces, más de 600 personas han muerto y otras 17.000 han resultado heridas en las protestas, según una comisión de derechos humanos iraquí.

Los manifestantes antigubernamentales han pedido una revisión completa de la élite política gobernante del país, el fin de la corrupción y de la represión policial.

A las demandas de los manifestantes se ha añadido su preocupación por la repercusión en Irak de los efectos de la escalada de tensión entre Irán y Estados Unidos, a raíz del asesinato del excomandante de las Brigadas Quds de Irán, Qasem Soleimani.

Los manifestantes iraquíes no quieren que su país se convierta en el escenario de un nuevo conflicto y se quejan de que hasta el momento no se ha podido formar un gobierno independiente.

Tras el fracaso de Allawi a la hora de formar gobierno, el presidente Salih encargó este miércoles a Zurfi, de 54 años de edad y exgobernador de la provincia de Nayaf, la tarea de formar un gobierno.

*Traducido por Daniel Gallego.