Primer ministro de Malasia: "Lo que sucedió en el estado de Rakáin es genocidio"
"Una clara debilidad de la ONU es cuando ve que un gobierno es absolutamente cruel con su gente, pero no puede hacer nada", dijo Mahathir Mohamad, primer ministro malasio.

Kuala Lumpur
El primer ministro de Malasia, Mahathir Mohamad, criticó este miércoles a Birmania por sus políticas contra la minoría rohinyá durante un discurso en un evento de alto nivel llamado "Crisis rohinyá: un camino a seguir", en en marco de 74º Asamblea General de las Naciones Unidas en Nueva York.
"Lo que sucedió en el estado de Rakáin [en el norte de Birmania] es genocidio. Lo que ocurrió fueron asesinatos en masa, violaciones sistemáticas y otras violaciones graves de los derechos humanos", dijo.
Hizo hincapié en que el gobierno de Birmania no estuvo dispuesto a tomar ninguna medida para resolver la crisis, lo que resultó en la huida en masa de los rohinyá, terminando la mayoría de ellos en campamentos de refugiados en el distrito de Cox’s Bazar, Bangladés.
"Elogiamos a Bangladés por todo lo que ha hecho al acoger a más de 1,2 millones de refugiados rohinyá", dijo.
Al subrayar que Malasia también trató de hacer lo mejor posible, pidió a otros Estados que hagan esfuerzos para poner fin a la crisis y aseguró que Malasia continuará insistiendo en que la repatriación se realice "de manera segura, voluntaria y digna".
"Sin embargo, las autoridades de Birmania han manipulado el tema rohinyá para incitar al miedo, el odio y la violencia. Por lo tanto, considerar la idea de simplemente otorgar la ciudadanía es inaceptable", dijo.
El primer ministro de Bangladés, Sheikh Hasina, dijo en el mismo evento que planteará el tema en la Asamblea General de la ONU durante su discurso programado para el viernes.
"La comunidad internacional debe garantizar que se aborden las causas profundas del problema rohinyá y se den cuenta de los crímenes atroces cometidos contra los rohinyá", informó la agencia de noticias estatal Bangladesh Sangbad Sangstha.
Hasina presentará una propuesta de cuatro puntos para la repatriación por la paz de los refugiados rohinyá y una solución sostenible a la crisis.
El primer ministro de Bangladés instó a Birmania a mostrar una clara voluntad política a través de acciones concretas para el retorno sostenible de los rohinyá a su tierra natal, ya que se enfrentan a una creciente presión en su hogar para enviar que regresen.
"Birmania debe generar confianza entre los rohinyá al descartar leyes discriminatorias y permitir visitas frecuentes al norte de Rakáin por parte de los representantes rohinyá y garantizar su seguridad y dignidad", agregó Hasina.
Los rohinyá rechazaron reiteradamente los esfuerzos conjuntos de Bangladés y Birmania para su regreso, ya que exigen un entorno pacífico en el estado de Rakáin junto con una ciudadanía y seguridad dignas.
"Birmania debe generar confianza entre los rohinyá al descartar leyes discriminatorias y permitir visitas frecuentes al norte de Rakáin por parte de los representantes rohinyá y garantizar su seguridad y dignidad", agregó Hasina.
Por otro lado, el presidente de Malasia habló el mismo día acerca de la crisis rohinyá durante su intervención en el Foro Mundial de Líderes de la Universidad de Columbia en Nueva York.
Mohamad dijo que es "desafortunado" que la ministra de Relaciones Exteriores, Jefe de Estado responsable de Birmania y Nobel de Paz, Aung San Suu Chi, no haya condenado las atrocidades infligidas a la minoría rohinyá de su país.
"Simpatizamos con ella e hicimos campaña para liberarla, pero ahora descubrimos que no defiende a otras personas en dificultad".
Mohamad agregó: “El problema es que no respetamos a la ONU. Los grandes países, los países poderosos, simplemente ignoran a la ONU y las resoluciones que hacen. Cuando los grandes países ignoran las resoluciones de la ONU, los países pequeños los siguen. Así que ahora estamos viendo que incluso países pequeños como Birmania pueden burlarse de la ONU".
Al destacar la inefectividad de la ONU frente a los problemas del mundo, el primer ministro de Malasia dijo: "Una clara debilidad de la ONU es cuando ve que un gobierno es absolutamente cruel con su gente, pero no puede hacer nada".
Mohamad recordó que EEUU acusó de dictador y de asesinar a su gente a Saddam Hussein para luego intervenir en Irak y derrocarlo. "Pero en el caso de Birmania, parece que nadie quiere invadir y derrocar al gobierno. Entonces, durante mucho, mucho tiempo, las personas en el estado de Rakáin tendrán que sufrir", continuó.
El primer ministro malasio señaló que para que el mundo sea mejor, debe adoptarse el multilateralismo: "Siempre hemos creído en resolver las cosas a través de la negociación, la conciliación o el tribunal de justicia. Si hubiéramos defendido el unilateralismo, habríamos resuelto los problemas mediante la confrontación e incluso la guerra. Pero nunca hemos hecho eso. En cambio, hemos negociado con nuestros vecinos. Entonces, el multilateralismo es algo inevitable ahora... Debido a que todo el mundo se ha convertido en un mercado, es importante que todos los países del mundo permanezcan en paz y estables y puedan convertirse en un socio comercial para nosotros".
Cuando se le pregunto acerca de la protesta organizada por parte de algunos grupos judíos por su participación en el foro de la Universidad de Columbia y sus críticas hacía los judíos, Mahathir Mohamad dijo:
"Uso mi derecho a la libertad de expresión. ¿Por qué no puedo decir algo contra ellos cuando mucha gente habla cosas desagradables acerca de mí y de Malasia y yo no protesto ni hago demostraciones? Tenemos que escuchar opiniones que no están a nuestro favor. La libertad de expresión se trata de expresarse libremente. Cuando dices "no, no puedes decir esto", "no puedes ser antisemita" entonces no hay más libertad de expresión.
Mohamad recordó a los participantes del evento que él aceptó el genocidio de los judíos durante la Segunda Guerra Mundial y dijo: "Fui muy solidario con ellos durante la guerra".
*Traducido por Aicha Sandoval Alaguna.