Parlamento francés aprueba proyecto de ley anti-COVID-19
El proyecto de ley debe pasar por el Consejo Constitucional antes de su aplicación pública.
PARÍS
El Parlamento francés aprobó el lunes por la mañana un proyecto de ley de salud que exige la vacunación para los profesionales de la salud y un pase de salud digital como prueba de que está libre de coronavirus para ingresar a lugares públicos, incluidos restaurantes, cafés y trenes.
Tras acaloradas discusiones y varias modificaciones al texto original en la cámara alta y baja del parlamento, la Asamblea Nacional votó a última hora de la medianoche para aprobar definitivamente el proyecto de ley relativo a la gestión de la crisis sanitaria.
El primer ministro Jean Castex ha remitido el proyecto de ley al Consejo Constitucional para su validación final con el fin de protegerlo contra las críticas que aseguran que viola libertades individuales. Es probable que el Consejo emita su decisión el 5 de agosto antes de que se aplique como ley.
“Después de 60 horas de debate, la mayoría y la oposición han encontrado el camino de la unidad para luchar contra la epidemia”, dijo en Twitter el ministro de Salud, Olivier Veran.
El ministro aseguró a los legisladores que el Gobierno hará un uso moderado del pase de salud y eliminará todas las restricciones "en el momento en que podamos prescindir de él".
Las principales disposiciones del texto incluyen vacunas obligatorias para el personal de salud y empleados de los sectores médico-sociales y sanciones por incumplimiento como falta de pago de salario. El borrador anterior pedía la suspensión del contrato laboral para los profesionales no vacunados.
También exige un aislamiento de 10 días para los pacientes positivos de COVID-19 y la imposición del pase de salud para que todos los adultos ingresen a cafés, restaurantes, incluso en las terrazas al aire libre, transporte público de larga distancia, ferias comerciales, centros comerciales a partir del 30 de agosto hasta el 15 de noviembre (en lugar de la fecha límite aprobada anteriormente del 31 de diciembre).
A partir del 30 de septiembre, los menores de 12 años también deberán portar el pase.
El pase de salud es una prueba impresa o un certificado digital en la aplicación TousAntiCovid del Gobierno que muestra las dosis de vacunación o un resultado negativo de las pruebas de antígeno o PCR de menos de 48 horas.
Las medidas del pase de salud se han aplicado en parte desde el 21 de julio para permitir el ingreso a lugares de cultura y ocio como museos, instituciones de arte, salas de cine y teatros con una reunión de más de 50 personas.
Un informe de noticias de BFMTV dijo que las últimas limitaciones han impactado negativamente al sector de la cultura, con cancelaciones y poca asistencia. Las instituciones culturales en Francia reabrieron en mayo después de haber estado cerradas desde octubre. Estuvieron cerrados de marzo a junio de 2020 durante el primer cierre.
Ver también:En qué consiste la controvertida ley francesa criticada por marginar a los musulmanesLa implementación de medidas de salud anti-COVID-19 ha dividido a la población francesa. Hasta ahora, cerca de 40 millones o casi el 60% de la población se ha vacunado con al menos una dosis.
Pero por otro lado, los anti-vacunas han estado organizando manifestaciones callejeras masivas donde se oponen a las restricciones del Gobierno, llamándolas “totalitarias” y “dictatoriales”.
Durante la visita de fin de semana a la Polinesia Francesa, Macron criticó a los anti-vacunas, cuestionando su "libertad" de permanecer sin vacunar mientras continúa representando el riesgo de infectar a la familia y otros miembros de la sociedad. “No es libertad, se llama irresponsabilidad, egoísmo”, dijo.
*Maria Paula Triviño contribuyó con la redacción de esta nota.
