OMS: 325 millones de personas en el mundo conviven con las hepatitis B y C

La Organización Mundial de la Salud (OMS) estima que unos 325 millones de personas en el mundo conviven con las hepatitis B y C.

La organización sanitaria considera el 28 de julio de cada año como el Día Mundial Contra la Hepatitis, y este año ha centrado sus esfuerzos en la prevención de la hepatitis B, muy común entre las madres y recién nacidos, bajo el lema Un futuro sin hepatitis.

En este sentido, la OMS llama a todos los países a trabajar juntos para erradicar esta enfermedad viral hasta el 2030, indicando que esto solo puede ocurrir mediante un esfuerzo y colaboración integral por parte de todos.

El virus de la hepatitis tiene cinco variaciones: A, B, C, D y E.

La A es más común y frecuente en lugares de bajos ingresos donde escasea la higiene.

La B y C son las que más muertes causan al año en el mundo: 1,3 millones.

El virus de la variación D es defectivo, es decir no es capaz de reproducirse tras la infección que provoca en la célula huésped, ya que sólo puede hacerlo en presencia de otro virus, denominado auxiliar, en este caso el de la B.

La E también puede verse en los animales, tanto domésticos como salvajes. En las embarazadas puede causar la muerte.

La principal forma de contagio de la hepatitis B y C ocurre como consecuencia de una transfusión sanguínea incontrolada, el uso común de jeringuillas, cuchillas de afeitar, cepillo de dientes, así como tatuajes o piercing realizados en condiciones insalubres, relaciones sexuales de riesgo y el contagio de madre a feto.

Por el momento, el método de protección más efectivo contra la hepatitis A y B es la vacuna. La hepatitis C carece de vacuna. Así mismo, la precaución, las medidas preventivas y concienciación sobre las formas de contagio son de suma importancia a la hora de prevenir la enfermedad. 

*Traducido por Daniel Gallego.