Musulmanes que viven la sequía en Etiopía rezan para pedir lluvias

Los residentes de la región nororiental de Afar, en Etiopía, se enfrentan a la temporada más cálida en años, debido a las condiciones de sequía. Sin embargo, los musulmanes como Mohammed Utban siguen ayunando en el mes sagrado del Ramadán.

Utban, quien vive en una pequeña tienda con su familia en un área afectada por las sequías, dice que sus oraciones estos días son para pedir lluvia, algo que podría ayudar a la comunidad a sobrepasar la sequía.

“Pido a Alá en Ramadán, pido que el omnipotente nos envíe lluvias”, dijo.

La cena de Ramadán de la familia de Utban es una simple sopa de avena y dátiles, ya que no se pueden dar el lujo de comer carne.

Afar es uno de los lugares más calurosos de África. La población es pastoral y su subsistencia depende de su ganado; los pastores intentan encontrar nuevas fuentes de agua desplazándose por lo menos dos veces al año.

Cuando escuchan sobre lluvias en otras partes de la región, la comunidad pastoral se desplaza hasta allá con sus carpas, en camellos, en búsqueda de agua.

Utban, quien vive con sus dos esposas y ocho hijos en la zona rural de la capital de la región de Afar, Semera, dijo que intenta acostumbrarse a la vida urbana dejando de lado su estilo de vida pastoral.

Trabaja en una agencia del gobierno como oficial de seguridad y gana un salario de USD 65; sueña con tener una casa con electricidad algún día.

Afar asegura que no ha obtenido beneficio de su ganado desde que empezaron a menguar las lluvias.

“Ya no soy pastor. Dejé todos los animales que tenía a mi hermano”, afirmó.

*Ahmed Fawzi Mostefai contribuyó con la redacción de esta nota