MOSCÚ

El ministro de Defensa de Rusia, Serguéi Shoigú, dijo este martes que el mundo unipolar se terminó y que la “operación militar especial” de su país en Ucrania marcó el tránsito a la nueva estructura multipolar.

En su discurso durante la décima edición de la Conferencia de Moscú sobre Seguridad Internacional (MCIS), Shoigú afirmó que Rusia no necesita armas nucleares para lograr sus objetivos militares en Ucrania y recordó que la doctrina militar rusa define claramente los casos de uso de las armas nucleares, a saber: circunstancias extraordinarias que amenazan la existencia del Estado.

Según Shoigú, Occidente acusa a Rusia de suponer una amenaza inexistente a fin de desviar la atención de las actividades de investigación biológica militar prohibidas en Ucrania.

Shoigú agradeció a la ONU y al Comité Internacional de la Cruz Roja por su cooperación despolitizada en Ucrania.

El ministro ruso señaló que la “operación militar especial” de Rusia hizo que la OTAN revelara su verdadera naturaleza y agregó que la alianza trasatlántica dejó de “esconderse” detrás de palabras de “carácter defensivo” y que extendió sus intereses hasta África, Oriente Medio y Asia-Pacífico.

Shoigú argumentó que los eventos en Ucrania son un motivo razonable para que Finlandia y Suecia se unan a la OTAN, y recordó que los dos países se habían acercado a la organización en los últimos años.

No obstante, Shoigú advirtió que el despliegue de fuerzas y armas de la OTAN en los países escandinavos desencadenará una reacción por parte de Moscú.

Shoigú reveló que especialistas rusos han estudiado cuidadosamente las armas occidentales que han sido capturadas en Ucrania y aseguró que estas armas no han logrado cambiar el curso de las batallas.

El ministro criticó a la Organización para la Seguridad y la Cooperación en Europa (OSCE) por adoptar un enfoque sesgado hacia Rusia y recalcó que el organismo se creó como una plataforma para el diálogo.

También se opuso al enfoque occidental de dividir el mundo en partes autoritarias y democráticas, con la idea generalizada de utilizar medidas severas, incluida la fuerza, contra aquellos “autócratas”.

Shoigú calificó de provocación la reciente visita de la presidenta de la Cámara de Representantes de Estados Unidos, Nancy Pelosi, al “Estado parcialmente reconocido de Taiwán”, y la describió como “un paso destinado a desestabilizar” la situación en la región de Asia-Pacífico.

El ministro avisó que la Aukus, la alianza de cooperación en materia de seguridad entre Australia, Reino Unido y Estados Unidos, podría convertirse en la “OTAN asiática”, lo que significaría nuevos desafíos para Rusia en su extremo Oriente.

Shoigú indicó que la predominación occidental se está convirtiendo en una cosa del pasado a pesar de todos sus esfuerzos por preservar su hegemonía global, y aseguró que la situación en el mundo sigue siendo tensa.

El ministro puso como ejemplo a Afganistán y Oriente Medio, donde los terroristas podrían intentar vengarse y recuperar sus posiciones.

Shoigú reiteró que la “operación militar especial” de Rusia en Ucrania puso fin a la hegemonía occidental en el mundo, pero dijo que llevará algún tiempo ajustar un nuevo orden multipolar. Sin embargo, aseguró que este ya es una realidad.

“Un mundo multipolar es la realidad de hoy. La transición del dominio de un líder global a varios centros de atracción no es fácil, pero crea condiciones reales para el desarrollo de Estados soberanos”, sentenció Shoigú.

*Traducido por Daniel Gallego.