ESTAMBUL

Tras la caída del régimen de Bashar, miles de civiles que vivieron en condiciones difíciles durante años continúan regresando a sus hogares gracias a la seguridad que se les brinda en sus zonas.

Durante muchos años, las familias desplazadas han luchado por sobrevivir en campamentos. Hoy, por primera vez, experimentan la alegría de regresar a sus ciudades y pueblos natales.

La destrucción y la crisis humanitaria causadas por la guerra en Siria han desplazado a millones de personas de sus hogares, obligándolas a buscar refugio en tiendas de campaña en países vecinos.

Muhammad Rahmun, uno de los repatriados a la aldea de Kafr Sajnah, en la zona rural del sur de Idlib, expresó su felicidad por regresar tras seis años de dura vida en los campamentos.

En declaraciones a la Agencia Anadolu, Rahmun declaró: «Vivimos en los campamentos en condiciones extremadamente duras, pero ahora damos gracias a Dios por la liberación de nuestra tierra y regresamos a ella, aunque esté destruida».

Rahmoun señaló que su aldea había sido ampliamente destruida por los bombardeos y que planeaba acampar sobre los escombros de su casa para expresar su apego a la tierra y la esperanza de reconstrucción.

Abdul Razzaq Muhammad, también residente de Kafr Sajna, comentó que habían enfrentado grandes dificultades en los campamentos desde su desplazamiento en 2019.

"Sufrimos las duras condiciones climáticas y la falta de infraestructura, y ahora regresamos a nuestra aldea a pesar de toda la destrucción, porque la vida en nuestra aldea, por difícil que sea, es mejor que una vida de desplazamiento", agregó.

Enfatizó que las casas de su aldea fueron destruidas por los bombardeos o saqueadas y vandalizadas deliberadamente, lo que indica que la alegría del regreso eclipsó el dolor de la destrucción y la devastación.

*Traducido por Daniel Gallego.