La expresidente chilena y actual alta comisionada de la ONU para los Derechos Humanos, Michelle Bachelet, llamó la atención a los políticos brasileños para que “den ejemplo a la gente" en medio de la respuesta a la pandemia del coronavirus. "En cualquier país del mundo donde los líderes desmintieron la existencia de la COVID-19 el efecto ha sido devastador. Esto ha ocurrido en muchos países, no sólo en Brasil”, afirmó.

Bachelet también aseguró este miércoles, en una rueda de prensa, que “sorprendentemente, incluso hoy en día, algunos líderes políticos siguen restando importancia a su impacto, menospreciando el uso de medidas sencillas como el uso de máscaras y la evitación de grandes reuniones. Incluso algunas figuras políticas siguen hablando casualmente de 'inmunidad de grupo', como si la pérdida de cientos de miles de vidas fuera un costo que puede ser fácilmente soportado por el bien común". "Politizar una pandemia de esta manera va más allá de la irresponsabilidad, es totalmente censurable”, resaltó.

La alta comisionada también aseguró que respetar los protocolos de bioseguridad “ayuda a prevenir el contagio del virus, y si los líderes no lo hacen no están dando el mejor ejemplo”.

En Brasil la pandemia se ha visto politizada debido a la postura que frente a ella asumió el presidente Jair Bolsonario, quien ha dicho que la enfermedad está sobreestimada y que tenerle miedo al nuevo coronavirus es de “cobardes”. Se ha rehusado, además, a usar el tapabocas en eventos públicos (incluso se lo quitó siendo positivo para COVID-19 frente a un grupo de periodistas) y dijo en público que él no piensa vacunarse contra el virus que ya deja más de 68,5 millones de contagiados y más de 1,56 millones de muertes a nivel mundial.

Este llamado de atención se suma al que realizó el 1 de diciembre Tedros Adhanom Ghebreyesus, director general de la Organización Mundial de la Salud (OMS), quien aseguró en un pronunciamiento público, al referirse a las cifras de contagios del país suramericano: "Creo que Brasil debe tomárselo muy, muy en serio. Es muy preocupante”.

Eduardo Pazuello, ministro de Salud brasileño, aseguró que el país suramericano ya tiene 300 millones de dosis, de diferentes vacunas contra el coronavirus, garantizadas para inmunizar a su población.

El 8 de diciembre el Gobierno de Brasil reportó 51.088 contagiados y 842 muertes, para un total de más de 6,6 millones de casos y más de 178 mil fallecidos a causa de la COVID-19.

Ver también: Plan de vacunación en Brasil contra el coronavirus priorizará a indígenas y profesionales de la salud.