Merkel tendrá plazo para adoptar normas más estrictas sobre migración
La canciller alemana tendrá dos semanas para conversar con sus socios de la Unión Europea antes de que el ministro del Interior comience a aplicar medidas más estrictas en las fronteras.

BERLÍN
La canciller alemana Ángela Merkel recibió este lunes un plazo de dos semanas por parte de la Unión Social Cristiana (USC) -su socio ultraconservador en la coalición de gobierno- para que adopte normas más estrictas sobre migración y asilo, para lo cual deberá llegar a un acuerdo con otros Estados miembros de la Unión Europea (UE).
El líder de la USC y ministro del Interior, Horst Seehofer, dijo en una conferencia de prensa en Múnich que esperaría el resultado de las conversaciones entre Merkel y sus socios de la UE hasta fin de mes y que a partir del 1 de julio comenzaría a aplicar medidas más estrictas en las fronteras.
"Los solicitantes de asilo que han sido registrados en otros Estados miembros de la UE deberían ser rechazados en la frontera de Alemania", insistió Seehofer. No obstante, Merkel se ha opuesto a que Alemania dé ese paso unilateral.
Por su parte, Seehofer argumenta que como ministro del Interior tiene el derecho de implementar tales medidas, incluso si la canciller se opone a ellas.
El "plan maestro de migración" del ministro ultraconservador, que incluye varias medidas controvertidas, ha llevado a una crisis dentro del gobierno de la coalición gobernante.
El plan prevé rechazar a los solicitantes de asilo en la frontera de Alemania si ingresan a la UE desde otro Estado miembro y se registran por primera vez allí, o si ya habían solicitado asilo y habían sido rechazados.
La USC, que enfrentará elecciones regionales en Baviera en octubre, ha agudizado recientemente sus críticas a la política de puertas abiertas para los refugiados de la canciller Merkel.
Alemania recibió más de un millón de refugiados en los últimos años, principalmente provenientes de Siria e Irak.
La decisión de Merkel en 2015 de abrir las puertas a los refugiados que huían de los conflictos y la persecución fue ampliamente criticada por los medios de comunicación conservadores, y fue explotada por los partidos de extrema derecha y populistas.
La Unión Demócrata Cristiana (UDC) y su partido hermano, la USC, sufrieron grandes derrotas en las elecciones federales del año pasado, mientras que la Alternativa de Extrema Derecha para Alemania (AfD) obtuvo votaciones récord y entró al Parlamento por primera vez.
*Carolina Zúñiga contribuyó a la redacción de esta nota.