México critica a la OEA por supuesta injerencia en los asuntos internos de Bolivia
El pasado lunes, la Organización de Estados Americanos propuso que sea creada una comisión internacional para asumir las investigaciones sobre corrupción en el país suramericano.
El secretario general de la Organización de los Estados Americanos (OEA), Luis Almagro, durante la sesión de apertura de la 49 Asamblea General de la OEA en Medellín, Colombia, junio 26, 2019. Archivo (Juancho Torres - Agencia Anadolu)
Colombia
El Gobierno de México rechazó el pronunciamiento de la Organización de Estados Americanos (OEA) sobre Bolivia y le solicitó que evite injerencias en los asuntos internos del país suramericano.
El pasado lunes, la Organización de Estados Americanos propuso que sea creada una comisión internacional para asumir las investigaciones sobre corrupción en Bolivia.
Al respecto, el director general de Organismos y Mecanismos Regionales Americanos de la Secretaría de Relaciones Exteriores de México, Efraín Guadarrama, le sugirió a la OEA que se comporte “de acuerdo a sus facultades, fomentando el diálogo, el consenso y la solución pacífica de las controversias en el hemisferio. Esto incluye el evitar aquellos posicionamientos que busquen tener injerencia en los asuntos internos de Bolivia”.
Guadarrama también le pidió al secretario general de la OEA, Luis Almagro, que se abstenga de "confrontarse con un Gobierno electo democráticamente como es el boliviano".
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Por su parte, el Ministerio de Relaciones Exteriores de Bolivia respondió al pronunciamiento de Almagro, en relación al proceso que se le sigue a la expresidenta Jeanine Áñez y a sus exministros por los hechos de violencia ocurridos en el 2019
“El Sr. Almagro no tiene la autoridad moral ni ética para referirse a Bolivia, después del daño profundo que le hizo al pueblo boliviano con su injerencia colonialista durante el proceso electoral del 2019. Sus acciones costaron vidas humanas y debe rendir cuentas por su comportamiento parcializado y alejado de la objetividad, que ha desprestigiado a tan importante instancia para los países de nuestra América”, destacó la Cancillería de Bolivia.
En noviembre de 2019, la OEA público un informe en el que cuestionó la transparencia de las elecciones presidenciales en las que el entonces presidente Evo Morales resultó vencedor.
En consecuencia, Morales renunció a su cargo y el 11 de noviembre la exsenadora Jeanine Áñez asumió la Presidencia, lo que generaría una oleada de manifestaciones contra el nuevo Gobierno.
La expresidenta Áñez y dos de sus exministros son acusados de los delitos de terrorismo, conspiración y sedición.
