Los diálogos entre Uganda y Ruanda llegaron a un punto muerto
Ambos países habían dado inicio en septiembre a una serie de conversaciones para poner fin a las tensiones debido a una serie de acusaciones de espionaje e interferencia política.

Kampala
Las delegaciones de Asuntos Exteriores de Uganda y Ruanda no lograron llegar a un acuerdo después de las conversaciones que se llevaron a cabo durante la noche del viernes.
En declaraciones a los periodistas después de su reunión en Kampala el viernes por la noche, Olivier Nduhungirehe, ministro de Asuntos Exteriores de Ruanda, dijo que había grupos armados que estaban recibiendo apoyo del gobierno de Uganda.
“Nuestra gente quiere estar segura de que los habitantes de Ruanda pueden ir a Uganda para comerciar y visitar a sus familiares sin temor a ser arrestados ilegalmente”, declaró el alto diplomático ruandés.
“Hay personas en nuestra frontera que quieren asegurarse de que vivirán en paz sin ser amenazados por grupos armados que operan en Uganda”, agregó el ministro.
El principal diplomático de Ruanda dijo que también había planteado los problemas de sus ciudadanos que “son arrestados arbitrariamente y detenidos ilegalmente y también torturados” en Uganda.
Por su parte, Sam Kutesa, ministro de Asuntos Exteriores de Uganda, señaló que se habían discutido los intentos de infiltración en las agencias de seguridad del país y el cierre de la frontera con Ruanda.
“Nunca apoyaremos ninguna fuerza que tenga la intención de desestabilizar a nuestros vecinos, incluida Ruanda”, aseveró el ministro de Uganda.
Las dos partes se reunieron por segunda vez desde que se creó una comisión de paz.
Ruanda y Uganda dieron inicio en septiembre a una serie de conversaciones con el objetivo de poner fin a las tensiones entre ambos países. Delegados de ambos lados reafirmaron el compromiso de sus gobiernos para restaurar las relaciones.
Los diálogos se dieron semanas después de que el presidente de Ruanda, Paul Kagame, y su homólogo de Uganda, Yoweri Museveni, firmaran un memorando de entendimiento en la capital de Angola, Luanda, el 21 de agosto, con el fin de aligerar las tensiones entre los dos países.
Ruanda también impidió que sus ciudadanos se movilizaran a Uganda por denuncias de detenciones arbitrarias de ruandeses y tortura en Uganda, acusaciones que Kampala niega.
*Traducido por Daniela Mendoza.
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