La falta de lluvias en Brasil podría provocar una crisis de desabastecimiento de energía
Brasil enfrenta la peor sequía de los últimos 20 años, de manera que está comprometido el suministro hidroeléctrico, que representa tres quintas partes de toda la electricidad que se genera en el país.
Imagen de archivo. Frente a la peor sequía en los últimos 20 años, la Agencia Nacional de Energía Eléctrica (Aneel) solicitó la puesta en funcionamiento de plantas térmicas que se activan en períodos de emergencia. (Emin Sansar - Agencia Anadolu)
BOGOTÁ, Colombia
El presidente de Brasil, Jair Bolsonaro, declaró este lunes que Brasil podría experimentar un serio problema de abastecimiento de energía en los próximos meses, debido a la intensa sequía que tiene en niveles mínimos a las represas.
“Estamos en las puertas de un problema serio. Estamos viviendo la mayor crisis hidrológica de la historia y vamos a tener dolores de cabeza”, afirmó Bolsonaro.
Frente a la peor sequía en los últimos 20 años, la Agencia Nacional de Energía Eléctrica (Aneel) solicitó la puesta en funcionamiento de plantas térmicas que se activan en períodos de emergencia. No obstante, la energía que se produce en estas plantas es más contaminante y costosa.
El Gobierno también podría autorizar la importación de electricidad desde Argentina y Uruguay, en caso de que sea necesario para normalizar el abastecimiento eléctrico.
De acuerdo con el director de la Aneel, Luiz Carlos Ciocchi, la balanza hidrológica en el período húmedo 2020-2021 fue la peor desde 1991, o sea desde que se comenzó a medir este indicador. La falta de agua resultaría en una crisis energética en Brasil, en donde la generación hidroeléctrica es responsable del 63% de la electricidad que se genera.
Ciocchi indicó que si el crecimiento económico no se hubiera frenado por la pandemia de la COVID-19, el país hubiera tenido un problema de suministro el año pasado.
“Se trata de la mayor crisis de la que se tiene noticia. Tenemos otro azar, no ha llovido y la lluvia generalmente cae hasta marzo. Es decir que ahora estamos en la fase de sequía. Vamos a ver qué podemos hacer”, agregó el presidente.
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La Aneel advirtió que el volumen de lluvias en los últimos meses se situó muy por debajo del esperado, lo que impediría que las hidroeléctricas operen a plena capacidad. Los niveles de agua en las hidroeléctricas en las regiones sudeste y centro-oeste de Brasil están en su punto más bajo desde 2015, cuando en el país se presentó una crisis hídrica.
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