La cacería está acabando con un raro halcón en Pakistán
De acuerdo con oficiales expertos en temas de vida salvaje, miles de halcones Bahri han sido vendidos a árabes acaudalados para usarlos en actividades de caza.

KARACHI, Pakistán
El poeta nacional pakistaní Allama Iqbal se refería frecuentemente al halcón Shaheen en sus poemas, admirando al ave mientras se abre paso a través de los cielos.
Sin embargo, el Shaheen, también conocido como el halcón Bahri, está desapareciendo rápidamente en los cielos del país debido al contrabando de esta especie con Oriente Medio.
El ave, declarada en peligro de extinción por la Convención sobre el Comercio Internacional de Especies Amenazadas de Fauna y Flora Silvestres, proviene de Europa y el ártico ruso pero migra hacia países más cálidos como Pakistán, India y Bangladés durante el invierno.
Bahri, que en árabe significa “del océano”, se refiere a que el hábitat natural de esta ave es cerca de los lagos y áreas costeras.
Las aves son vendidas a árabes acaudalados que los entrenan para la cetrería: una práctica realizada desde hace siglos en la que se usan halcones para cazar presas salvajes.
Humaira Aisha, funcionaria de la división de Karachi (Pakistán) del Fondo Mundial para la Naturaleza (WWF, por su sigla en inglés), le dijo a la Agencia Anadolu que el comercio ilegal ha causado la disminución en la preservación de la vida de esta especie.
El halcón femenino (más grande y más fuerte que el masculino) es la primera opción para los compradores, según informa Aisha. Un ave (macho) de este tipo en promedio puede ser vendida entre 500.000 hasta 1.000.000 de rupias pakistaníes, que equivalen a USD 4.745 y USD 9.490.
Tahir Qureshi, miembro de la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza en Karachi, explicó que una hembra más fuerte podría llegar a costar hasta cinco millones de rupias, es decir, USD 47.450.
En la región de Sind, al sur de Pakistán, donde llegan las aves en busca de costas y lagos cálidos, Mumtaz Soomro, un trabajador del departamento de vida salvaje, confirmó que la población del ave ha disminuido en la última década.
“En los últimos meses hemos capturado docenas de Bahris en diferentes partes de la provincia, como parte de una campaña del Gobierno que busca proteger esta especie en peligro”, le dijo Soomro a la Agencia Anadolu.
Contrabando afecta a 6.000 halcones
Algunos reportes independientes estiman que se ha visto entre un 50% y un 60% menos de halcones en Pakistán de una década hasta ahora.
Un funcionario gubernamental del departamento de cambio climático, quien habló en condición de anonimato debido a restricciones de hablar con medios de comunicación, dijo que cerca de 6.000 halcones (de los cuales el 70% son Bahri) son llevados a Oriente Medio para ser vendidos por contrabando cada año.
Naeem Ashraf Raja, director de biodiversidad del Ministerio de Cambio Climático, no confirmó o negó las cifras presentadas, pero dijo que “es posible”.
El Gobierno ha puesto pancartas publicitarias de tamaño real en los aeropuertos advirtiendo el contrabando de los halcones Bahri, pero las penalidades siguen siendo relativamente livianas comparadas con las posibles consecuencias.
La máxima penalidad para un contrabandista es una multa de 50.000 rupias (USD 475) o una condena de seis meses en prisión, un grado de disuasión que, según indica Raja, perjudica los esfuerzos para la protección de la especie.
Los Bahris entrenados se usan para cazar a la avutarda hubara, la cual se encuentra en el mismo territorio y también se encuentra en peligro de extinción. La avutarda, cuyo tamaño es similar al de una gallina, es altamente buscada por los árabes pudientes pues creen que su carne es afrodisíaca.
Los árabes de linaje real visitan frecuentemente Pakistán, aceptando la invitación de políticos locales y funcionarios del Gobierno, los cuales organizan safaris de cacería para sus invitados.
En 2015, el alto tribunal de Pakistán ordenó la prohibición absoluta de la cacería de especies de aves y animales exóticos. Sin embargo, la prohibición fue levantada parcialmente en 2016 después de que el Gobierno presentara una petición argumentando que la cacería era “fundamental” para las relaciones diplomáticas con los países de Oriente Medio.
“Para ser honesto, nadie tiene una cifra exacta del número de halcones que son capturados para su contrabando anualmente”, dijo Qureshi.
“Todas estas son suposiciones, las cuales podrían ser verdaderas o falsas, ningún trabajador de vida salvaje podría desafiar a los poderosos cazadores furtivos locales ni a sus ricos compradores”.
Sin embargo, si continúa creciendo la tasa de contrabando, muchos temen que las futuras generaciones de pakistaníes tengan poco entendimiento de la descripción del poeta Allama Iqbal del agraciado Shaheen.
*Daniela Mendoza contribuyó en la redacción de esta nota.
El sitio web de la Agencia Anadolu contiene sólo una parte de las historias de noticias ofrecidas a los suscriptores en el Sistema de Difusión de AA News (HAS), y en forma resumida.