Jefa ejecutiva de Hong Kong asegura que nunca propuso dimitir por la crisis política

La jefa ejecutiva de Hong Kong, Carrie Lam, aseguró este martes que nunca propuso dimitir por la crisis política y los disturbios sociales surgidos a raíz de su propuesta de cambio en la ley de extradición, y negó que Pekín le hubiera impedido dimitir, según informó el diario hongkonés South China Morning Post.

“Nunca presenté una dimisión al gobierno popular central. Ni siquiera he contemplado discutir una dimisión con el gobierno popular central. La decisión de no dimitir es mi propia elección”, dijo Carrie.

Sus declaraciones se dan un día después de que la agencia de noticias británica-canadiense, Reuters, filtrara una grabación suya en la que se le oye decir, durante una reunión a puertas cerradas, que, en caso de tener elección, dimitiría por haber ocasionado “estragos imperdonables” a la región administrativa especial.

Durante sus declaraciones este martes, Carrie añadió que en la grabación filtrada intentaba explicar que dimitir podría ser una opción fácil para ella. “Pero durante los últimos tres meses me he dicho a mí misma repetidas veces que yo y mi equipo deberíamos quedarnos para ayudar a Hong Kong en esta situación tan difícil y servir a la gente de Hong Kong”, comentó Carrie.

“No he elegido tomar el camino más fácil, es decir abandonar (mi puesto como jefa ejecutiva). Más bien (prefiero) quedarme y recorrer este camino junto con mi equipo y la gente de Hong Kong”, agregó Carrie.

Cuando se le preguntó sobre si la grabación había sido filtrada por el Gobierno de la región administrativa especial en un intento por culpar a China, Carrie rechazó dichas afirmaciones “de manera clara y enérgica”.

“Estaba y sigo estando muy decepcionada por la grabación y posterior filtración a la prensa de mis comentarios durante una sesión totalmente privada y exclusiva que, en realidad, se trataba de una comida, la cual estaba claramente sujeta a las normas del Chatham House (Royal Institute of International Affairs/Real Instituto de Asuntos Internacionales, con sede en Londres)”, contestó Carrie.

“Así pues, cualquier sugerencia o afirmación de que yo o el Gobierno (de Hong Kong) hayamos jugado algún papel en esto carece absolutamente de fundamentos”, afirmó Carrie.

La jefa ejecutiva también desestimó las alegaciones que apuntan a la pérdida de la región de un “alto grado de su autonomía” a causa de que China comprometiera el principio de "un país, dos sistemas", al ejercer presión sobre el Gobierno de la región para que no otorgara concesiones a los manifestantes.

“Pekín todavía cree que el Gobierno de la ciudad es capaz de controlar esta (situación) difícil. Así que no hay lugar a la pérdida (del principio) de 'un país, dos sistemas' o el gran nivel de autonomía”, indicó Carrie.

Cuando le preguntaron si consideraba invocar la Ordenanza de Regulaciones de Emergencia, según apuntan ciertos informes, Carrie reiteró que la responsabilidad de su Gobierno era considerar las diferentes leyes en vigor para lidiar con la crisis en Hong Kong.

“Si la violencia disminuye o desaparece, no tenemos necesidad de considerar el uso de otras ordenanzas más”, dijo Carrie.

Por último, la jefa ejecutiva dijo que su gobierno seguiría contactando con los diversos sectores de la sociedad y organizando más reuniones a puertas cerradas en el futuro cercano.

El proyecto de ley

En Hong Kong se han realizado protestas masivas en contra de la decisión de la presidente ejecutiva, Carrie Lam, de introducir una enmienda que legalizaría la extradición de sospechosos a China, Macao y Taiwán.

El proyecto de ley excluye los delitos políticos, pero en Hong Kong, con una población de 7,4 millones, la mayoría de la población está preocupada por que las personas sean sometidas a detenciones arbitrarias, procesos judiciales injustos e incluso torturas bajo el sistema judicial de China.

En las protestas, que iniciaron a comienzos de junio, se han presentado incidentes violentos, entre ellos un ataque a la oficina del enlace chino en la región.

En una conferencia de prensa el 15 de junio, Carrie Lam anunció que el proyecto de ley había causado grandes discrepancias en la sociedad y, por lo tanto, había sido suspendido.

Lam se disculpó por la enmienda que condujo a las protestas y afirmó que el proyecto de ley no estará en la agenda durante este periodo legislativo.

Sin embargo, los líderes de las manifestaciones afirmaron que continuarían sus protestas hasta que el proyecto de ley fuera cancelado oficialmente.

*Traducido por Daniel Gallego.