Italia reportó 19.644 nuevos casos de coronavirus el sábado 24 de octubre, el pico más alto en un solo día desde el comienzo de la pandemia. Según datos del Ministerio de Salud, se realizaron 178.000 pruebas de hisopado en las últimas 24 horas. El número total de casos confirmados en el país alcanzó los 504.509.

El país europeo registró 151 nuevas muertes en el último día, con lo que el número de víctimas mortales a nivel nacional ascendió a 37.210.

El aumento del número de contagios observado en las últimas semanas ha sometido al Gobierno a una presión creciente para que promulgue nuevas medidas restrictivas, a fin de evitar un nuevo cierre nacional que sería devastador para la frágil economía italiana.

El primer ministro Giuseppe Conte se reunió el sábado con las autoridades regionales para planificar nuevas medidas restrictivas que podrían ser impuestas a nivel nacional tan pronto como la próxima semana.

En los últimos días, los gobernadores locales de varias regiones han promulgado toques de queda nocturnos en un intento de detener las enormes reuniones fuera de los bares y restaurantes.

Las nuevas normas desencadenaron una violenta protesta en Nápoles el viernes por la noche, que provocó disturbios urbanos y enfrentamientos entre manifestantes enmascarados y la Policía.

La ministra del Interior, Luciana Lamorgese, calificó el sábado las protestas como "inaceptables", añadiendo que los fiscales de Nápoles han iniciado una investigación. Lamorgese también dijo que los oficiales de seguridad planeaban aumentar las fuerzas policiales en la zona para evitar nuevos disturbios.

*José Ricardo Báez G. contribuyó con la redacción de esta noticia.