Una delegación militar israelí, encabezada por el Jefe de Estado Mayor de la Fuerza Aérea de Israel, Amikom Norkin, entregó, durante su visita a Rusia, un informe de 40 páginas sobre los hechos que llevaron al derribe de un avión militar ruso, un Il-20, en la noche del pasado lunes, cerca de la provincia siria de Latakia.

Según el periódico Kommersant, en el informe se indica que el día del incidente baterías de defensa aérea S-200 sirias lanzaron sus misiles contra los cazas israelíes durante unos 40 minutos. Algunos de estos misiles derribaron el Il-20 y otros cayeron en territorio libanés.

En la reunión ambas delegaciones se pusieron de acuerdo en reforzar la coordinación entre ellos en Siria.

El ministro de Defensa ruso, Serguéi Shoygu, sostuvo este martes una llamada telefónica con su homólogo israelí, Avigdor Lieberman, después del derribe del avión. "La responsabilidad del derribo del avión ruso y la muerte de la tripulación recae exclusivamente en Israel", le dijo Shoygu a Lieberman, y agregó que Rusia se reservó el derecho de tomar medidas en respuesta.

Shoygu aseguró que los pilotos israelíes utilizaron el avión ruso como un escudo para esconderse de los sistemas de defensa sirios, convirtiéndolo así en un objetivo. "Escondidos detrás del avión ruso, los pilotos israelíes lo pusieron en la línea de fuego de la defensa aérea siria", añadió el Ministerio ruso.

También dijo que Israel había informado a Rusia sobre una operación planificada solo un minuto antes del ataque aéreo, sin dejar tiempo para que los militares rusos trasladaran el avión a una zona segura.

*Daniel Gallego contribuyó con la redacción de esta nota