Hungría y Alemania difieren en postura sobre política de refugiados

La canciller alemana, Angela Merkel, y el primer ministro húngaro, Viktor Orban, presentaron puntos de vista totalmente opuestos sobre la crisis de los refugiados en una tensa conferencia de prensa conjunta tras su reunión en Berlín este jueves.

Merkel defendió su enfoque humanitario sobre la crisis de los refugiados y destacó que decidió abrir las fronteras para los refugiados en 2015 debido a circunstancias excepcionales en ese momento.

"Siempre debemos recordar, y nunca debemos olvidar que se trata de seres humanos ... También se trata de uno de los mensajes básicos de Europa, y es la humanidad", dijo.

Merkel reconoció que los Estados miembros de la UE habían cometido un error en el pasado al descuidar a los refugiados sirios y al dejar a Turquía sola al enfrentar este desafío, hasta que los refugiados comenzaron a llegar a Europa.

"Hablé de esto a menudo, todos habíamos descuidado la prestación de asistencia a los campos de refugiados en Siria y a muchos refugiados que buscaban protección en Turquía", dijo.

El canciller subrayó que el acuerdo de refugiados UE-Turquía de 2016 ha tenido éxito en la reducción significativa de los flujos irregulares de refugiados y la mejora de las condiciones de los refugiados sirios en Turquía.

Merkel recordó que la UE prometió con ese acuerdo reasentar a algunos de los refugiados en todos los Estados miembros.

"Turquía no habría aceptado este acuerdo, si no aceptamos recibir refugiados de Turquía", dijo.

Desafiando el enfoque humanitario de Merkel durante la conferencia de prensa, Orban argumentó que esto estaba sirviendo como un "factor de atracción", alentando a más inmigrantes a intentar ingresar a Europa.

El primer ministro húngaro abogó por medidas más estrictas en las fronteras exteriores de la UE, para detener los cruces ilegales. "Es injusto que muchos en Alemania nos acusen de no mostrar suficiente solidaridad. "De hecho, en Hungría unos 8.000 guardias armados conducen patrullas de 24 horas en la frontera", dijo.

Orban argumentó que, a falta de tales medidas por parte de Hungría, miles de migrantes habrían venido a Alemania todos los días.

Merkel ha estado bajo creciente presión en su país para abordar el tema de los refugiados. Recientemente acordó medidas más estrictas, después de que el líder de su coalición, la Unión Social Cristiana (CSU, en alemán) y ministro del Interior, Horst Seehofer, amenazara con abandonar el gobierno.

Alemania recibió más de un millón de refugiados en los últimos años, principalmente de Siria e Irak.

La decisión de Merkel en 2015 de abrir las puertas a los refugiados que huían de los conflictos y la persecución fue ampliamente criticada por los conservadores, y fue explotada por los partidos de extrema derecha y populistas.

*Maria Paula Triviño contribuyó con la redacción de esta nota.