El historiador austríaco y director del Museo del Crimen de Viena, Harald Seyrl, señaló en el 45 aniversario del asesinato de Danis Tunaligil, embajador turco en Austria, que dicho ataque terrorista, perpetrado por armenios, no ha tenido precedentes en la historia del país.

El 22 de octubre de 1975, el Ejército Secreto Armenio para la Liberación de Armenia (ASALA) y los Comandos de Justicia del Genocidio Armenio (JCAG) reivindicaron el asesinato del embajador Tunaligil.

Seyrl participó en un evento de conmemoración en la embajada de Turquía en Viena, al que asistieron representantes de varios países y público austriaco.

El historiador señaló que el asesinato que ocurrió 45 años atrás en la embajada de Turquía no solo conmocionó profundamente a ambos países, sino también a todas las sociedades civilizadas.

Seyrl compartió detalles de la investigación realizada por las fuerzas de seguridad en ese momento con respecto al asesinato de Tunaligil, organizado por tres terroristas.

Recordó que después del asesinato, se desató en Viena una ola de violencia de terrorismo armenio que se extendió por toda Europa.

"Este ataque fue una situación fuera de lo común porque un ataque terrorista a este nivel no se ha presentado en Austria incluso hasta ahora. Un embajador de un país fuerte e importante como Turquía fue atacado cuando desempeñaba sus funciones", agregó.

Seyrl señaló que no se pudo identificar a los miembros de ASALA y JCAG que perpetraron el ataque.

El historiador concluyó que los eventos conmemorativos de este tipo son importantes y deben ser respetados.

Conflicto en el Alto Karabaj

Las relaciones entre Azerbaiyán y Armenia han sido tensas desde 1991, año en el que el Ejército armenio ocupó la región del Alto Karabaj, también conocido como Nagorno-Karabaj, un territorio reconocido internacionalmente como parte de Azerbaiyán.

Alrededor del 20% del territorio de Azerbaiyán ha permanecido bajo ocupación ilegal armenia durante casi tres décadas.

El 27 de septiembre estallaron nuevamente los enfrentamientos entre ambos países y los llamados internacionales para que se detuvieran los combates no han recibido respuesta. Armenia ha seguido atacando a civiles y a fuerzas azerbaiyanas, los legítimos dueños de la región ocupada.

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El Grupo de Minsk, de la Organización para la Seguridad y la Cooperación en Europa (OSCE), copresidido por Francia, Rusia y Estados Unidos, se formó en 1992 para encontrar una solución pacífica al conflicto; sin embargo, este no fue fructífero. En 1994 se acordó un alto al fuego, pero se ha roto en repetidas ocasiones.

Varias potencias internacionales han pedido que se ponga fin a los enfrentamientos, mientras que Turquía ha apoyado el derecho de Azerbaiyán a la autodefensa y ha exigido la retirada de las fuerzas invasoras armenias en el Alto Karabaj.

*Aicha Sandoval Alaguna contribuyó con la redacción de esta nota.