Experto señala que el mundo podría encontrarse en un punto sin retorno ante el cambio climático
Huseyin Toros, investigador en ciencia atmosférica y calidad del aire, advierte sobre la fuerte relación que existe entre el aumento de las temperaturas, el cambio climático y el uso de combustibles fósiles.

Ankara
Huseyin Toros, experto en ciencia atmosférica y calidad del aire en la Universidad Técnica de Estambul, habló con la Agencia Anadolu sobre los fenómenos meteorológicos extremos, especialmente las altas temperaturas, y advirtió que el mundo podría encontrarse en un punto sin retorno si la humanidad no aprende las lecciones necesarias.
Toros habló del último informe sobre el aumento de las tendencias de temperatura del servicio europeo de cambio climático Copernicus, el cual anunció que "noviembre de 2020 fue el más cálido registrado en el mundo".
"La humanidad se dispara en el pie", expresó Toros sobre su preocupación por el hecho de que las personas no han tomado las precauciones necesarias frente a las continuas amenazas de eventos climáticos extremos, como las altas temperaturas y el aumento del nivel del mar, causados por el cambio climático y el calentamiento global.
"El hecho de que los primeros diez meses de 2020 registraran, a escala mundial, temperaturas de aproximadamente 1,2 grados Celsius (ºC) por encima del promedio de 1850-1900, y que las temperaturas en el norte de Asia, especialmente en la región ártica de Siberia, estuvieran 5 °C por encima del promedio, ha hecho que los científicos se preocupen por la seguridad y sostenibilidad del sistema ecológico", enfatizó Toros.
A nivel mundial, las temperaturas de noviembre de 2020 fueron 0,77 ºC más altas que en la media de los 30 años comprendidos entre 1981 y 2010, con un promedio global de 0,1 grados centígrados (°C) más alto que el noviembre más cálido anterior, que fue registrado en 2016 y en 2019, anunció el lunes Copernicus.
Toros indicó que los efectos negativos del cambio climático amenazan la seguridad alimentaria de los más pobres y vulnerables del mundo, ya que casi 690 millones de personas, es decir el 8,9% de la población mundial, sufrió de desnutrición en 2019, según la Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO).
'Poner fin al desperdicio'
El experto destacó la fuerte relación entre el aumento de las temperaturas, el cambio climático y el consumismo, especialmente el uso de combustibles fósiles, e hizo un llamado a poner fin a todo tipo de desechos.
“El calentamiento global, provocado por los contaminantes liberados al aire como consecuencia del uso de combustibles fósiles directa o indirectamente por la industria, el tráfico y la calefacción, afecta negativamente a la humanidad desde el punto de vista socioeconómico”, advirtió Toros.
Señaló, además, que estos gases también afectan la salud pública, ya que los estudios científicos han evidenciado que la contaminación del aire causa muertes relacionadas con el cáncer de pulmón y enfermedades cardiovasculares.
"La contaminación del aire es un asesino invisible y furtivo que mata lentamente", señaló Toros, refiriéndose a los hallazgos de la Organización Mundial de la Salud de que mata a aproximadamente siete millones de personas en todo el mundo cada año.
Toros mencionó que el mundo debería invertir más en energía renovable para reducir los costos de atención médica y aumentar la comodidad de la vida.
"Debemos aumentar las actividades de sensibilización mundial para utilizar los recursos de manera eficiente y económica. Debemos acabar con todo tipo de desperdicio", aseveró Toros.
El experto concluyó que los países desarrollados deberían invertir más en agua, aire y alimentos a escala global para la sostenibilidad y seguridad del mundo.
*Juan Felipe Vélez Rojas contribuyó con la redacción de esta nota.