Por: Ahmad Adil

Mohammad Mukhtar Ansari se ha desempeñado como Comisionado Jefe de Información y fue designado como uno de los tres interlocutores en Jammu y Cachemira por el Gobierno de India entre 2010 y 2011.

En una conversación exclusiva con la Agencia Anadolu, MM Ansari dijo que la decisión de la India de anexar Jammu y Cachemira fue equivalente a violar una sagrada confianza y entendimiento que tenía India con su vecino, Pakistán.

Cachemira, una región del Himalaya de mayoría musulmana, es retenida por India y Pakistán en partes y reclamada por ambos en su totalidad. Una pequeña zona de Cachemira también está en manos de China. Algunos grupos en Jammu y Cachemira han estado luchando por años contra el Gobierno indio ya sea por la independencia o por la unificación con el vecino Pakistán.

Jammu y Cachemira gozaban de un estatus especial, pero éste fue revocado por el Gobierno de la India en 2019. Un año después de la decisión, tomada el 5 de agosto de 2019, Ansari dijo que, aunque la disposición constitucional que le daba el estatus especial a la región fue revocada con el argumento de que así se podría garantizar un desarrollo más rápido en la zona y contener la militancia, los dos objetivos no se han cumplido. “El objetivo de restaurar la paz no se ha cumplido”, dijo el analista.

Añadió que las actividades socioeconómicas en la zona también han sufrido debido a que el desempleo ha aumentado. “La fuerte militarización de la región desalienta todas las formas de inversiones públicas y privadas”, dijo a la Agencia Anadolu.

Ansari, también ex comisionado de información y profesor de economía, dijo que la implementación de la nueva ley de domicilio parecía una estrategia similar a la emprendida por Israel en Cisjordania para cambiar la composición poblacional de la región, que es de mayoría musulmana. 

El analista también pidió la apertura urgente de conversaciones tripartitas entre India, Pakistán y China para resolver las controversias y definir sus fronteras, un tema crítico para garantizar la paz y el desarrollo sostenibles en la región.

“No hay ninguna razón por la cual el Gobierno del primer ministro Modi (India), que tiene un mandato político absoluto y autoridad, no debería involucrar a los vecinos para resolver los asuntos controversiales”, dijo.

¿Ha logrado el Gobierno indio su objetivo tras la anexión de Jammu y Cachemira?

Contrariamente a las expectativas y promesas, hemos visto que, en el último año, la militancia y la violencia han aumentado, resultando en violaciones de derechos humanos sin precedentes. El objetivo de restablecer la paz no se ha cumplido. Asimismo, las actividades socioeconómicas también han sufrido debido a que el desempleo ha aumentado. La fuerte militarización de la región desalienta todas las formas de inversiones públicas y privadas. Casi no hay desarrollo en el terreno y la militancia continúa allí.

A diferencia de otras partes del país donde las personas utilizan los servicios de Internet 4G, las personas en Jammu y Cachemira se ven privadas de dichos servicios debido a que existe una situación de guerra. Como resultado, los estudiantes y los maestros no pueden usar las tecnologías de la información y la comunicación para la educación en línea y las oportunidades laborales. Al mismo tiempo, el comercio electrónico también se ve afectado negativamente. La falta de acceso a las últimas plataformas digitales está afectando la vida de las personas que deben mantener el distanciamiento social en tiempos de pandemia.

La actividad política en Cachemira se ha detenido hasta el punto de que incluso los políticos pro-indios han detenido sus actividades. ¿Cree que existe el alcance de la reactivación de la política pro-India?

El liderazgo político, incluso aquellos que son conocidos por ser pro-India y que han estado asociados con la formación de gobiernos en el pasado, también fueron encarcelados durante más de un año. No hay actividad política ni gobernabilidad democrática en ningún nivel. Existe un enorme déficit de confianza entre los gobernantes y los gobernados. Muchos jóvenes y trabajadores políticos de todos los tonos son detenidos bajo leyes draconianas como la Ley de Seguridad Pública (PSA) y eso también, sin asignar ninguna razón. Dichas leyes no se invocan en la India democrática.

Hay un temor en Cachemira de que la decisión del Gobierno indio tendrá un efecto en cascada en la demografía de la región. ¿Cuán real es el miedo?

El Gobierno ha implementado apresuradamente la ley de domicilio. El cambio en la ley se ve como un intento de cambiar la demografía de Cachemira para cumplir los deseos de los grupos de derecha hindúes que han estado exigiendo abiertamente un cambio en la composición de la población para obtener ventajas electorales. La implementación de la nueva ley de domicilio ha recibido oposición por parte de la gente en casi todas las partes de Jammu y Cachemira. El argumento es que el Gobierno está cambiando deliberadamente el carácter de mayoría musulmana de la región. Supuestamente, se está intentando el modelo israelí de Cisjordania, donde la ocupación forzosa del territorio y el fomento de nuevos colonos del exterior cambiarán el carácter demográfico de la región. La gente se resiste al cambio.

Ver también: Líder del partido gobernante de la India promete el regreso de la estadidad a Cachemira

Convertir la Línea de Control en una Línea de Concordia

Usted formó parte del grupo de interlocutores designado por el Gobierno para Jammu y Cachemira. ¿Cuál fue su experiencia, y se realizó alguna acción basada en su informe?

Hemos tenido sesiones de consulta masivas con todos los interesados en los 22 distritos de la región, incluso con las fuerzas de seguridad. Hicimos ciertas recomendaciones cada mes para abordar las quejas de las personas, la mayoría de las cuales fueron implementadas por el gobierno. Como resultado, el registro muestra que la militancia se redujo y fue la más baja en 2011 y 2012.

¿Cuáles fueron las principales recomendaciones en su informe al Gobierno?

En general, habíamos recomendado trabajar para la solución negociada del problema de Cachemira con Pakistán y aumentar los contactos de persona a persona para fines personales y profesionales. También solicitamos que la Línea de Control (LoC) que divide el antiguo estado de Jammu y Cachemira en territorios controlados por la India y Pakistán sea tratada como Línea de Concordia.

El informe también habló sobre la reducción del déficit de confianza entre Nueva Delhi y Srinagar al fortalecer la disposición del Artículo 370 y convertirla en una disposición especial permanente en lugar de una disposición temporal. También solicitamos la revocación de las leyes draconianas y la realización de elecciones libres y justas para permitir el surgimiento de un liderazgo de calidad en todos los niveles de gobierno.

Desafortunadamente, el Gobierno de entonces y el actual no se han molestado en mirar el informe para aceptarlo o rechazarlo formalmente. Los cachemires, por lo tanto, sienten que Nueva Delhi los ha engañado. Esa es la causa de la agitación en el Valle de Cachemira.

Mantener conversaciones tripartitas

¿Cuál, en su opinión, es la necesidad del momento y lo que debe hacer el Gobierno en Cachemira?

Primero, sin la liberación de todos los detenidos políticos, puede que no sea posible iniciar procesos políticos. Por lo tanto, el Gobierno debe liberar a todos los detenidos que se encuentran bajo arresto domiciliario sin motivo. Se deben hacer preparativos para celebrar elecciones.

En segundo lugar, dado que Jammu y Cachemira no tienen fronteras demarcadas, se requiere con urgencia iniciar un proceso de diálogo tripartito con Pakistán y China para resolver todas las cuestiones contenciosas relacionadas con la finalización y aceptación de las fronteras internacionales, que son fundamentales para garantizar una paz sostenible y desarrollo en la región. No hay ninguna razón por la cual el gobierno del primer ministro Modi (de India), que tiene un mandato político absoluto y autoridad, no involucre a sus vecinos para resolver los asuntos en disputa.

En los últimos meses, la tensión entre India y China en la región de Ladakh ha aumentado. Muchas personas piensan que las tensiones tienen su origen en la decisión india de eliminar el estatus especial de la zona, que también hacer parte de Cachemira. ¿Ve alguna relación? Últimamente, China también está haciendo declaraciones sobre Cachemira.

La derogación del artículo 370 y la reorganización del antiguo estado tienen ramificaciones internacionales, por lo que China y Pakistán se han opuesto vehementemente a la acción en todos los foros. Las crecientes tensiones en las fronteras con China y Pakistán son atribuibles a una prolongada disputa fronteriza con los vecinos. Las razones son obvias. La LoC en el lado de Pakistán y la Línea de Control Actual (LAC) en el lado de China no son los límites aceptados por ninguno de los tres países con armas nucleares, a saber, India, Pakistán y China. De todo el antiguo Jammu y Cachemira, gobernado por Maharaja Hari Singh, quien firmó el documento de adhesión con India, el territorio está ocupado en parte por India, Pakistán y China. Todos estos ocupantes deben resolver amigablemente las disputas relacionadas con la frontera a través de negociaciones políticas y diplomáticas, en lugar de usar sus poderes nucleares. Hasta que esto suceda, la gente de la región seguirá sufriendo. 

*Susana Noguera colaboró con la redacción de esta nota.