Turquía tiene preocupaciones legítimas de seguridad con respecto a su frontera sur, pero EEUU no respaldará su operación militar en el norte de Siria, dijeron este viernes altos funcionarios del Departamento de Estado.

“En primer lugar, Estados Unidos no respaldará esta invasión; no le dará ningún tipo de cobertura política y de ninguna forma piensa que sea una buena idea. Pone en peligro a nuestros aliados en la lucha contra el terrorismo, las SDF (Fuerzas Democráticas Sirias), la mayoría de las cuales son de la región ", dijo uno de los funcionarios en un comunicado sobre la situación en Siria.

Estados Unidos no brindará ningún apoyo militar a la operación, agregó el funcionario.

"Si Turquía actúa de una manera desproporcionada, inhumana, o cruza los limites que el presidente (Donald Trump) tiene en mente, Estados Unidos está dispuesto a imponer costos significativos", subrayó el funcionario.

La declaración subraya que Turquía tiene preocupaciones legítimas de seguridad, ya que ha estado sufriendo ataques terroristas por parte del PKK.

"Entonces Turquía tiene preocupaciones de seguridad legítimas, lo que el presidente ha indicado repetidamente, pero la gente del noreste de Siria, incluida la población kurda, tiene sus propias preocupaciones, y tenemos una serie muy importante de intereses de seguridad en el noreste de Siria", dijo el funcionario. .

Al destacar que EEUU necesita un socio en el terreno, dijo que ese socio han sido las Fuerzas democráticas Sirias, que tienen como componente importante al YPG, que es la rama siria del PKK.

"Ese, por supuesto, es el problema para Turquía, que ha sufrido terribles ataques terroristas del PKK durante los últimos 35 años, desde 1984", agregó el funcionario.

Al referirse a los detenidos en las cárceles que están bajo el control de las SDF, el funcionario dijo que Turquía asumirá la responsabilidad de los detenidos si toman el control de un área donde hay tales centros de detención.

Agregó que el tema de los detenidos es "obviamente una preocupación" del presidente Donald Trump.

El miércoles 10 de octubre, tropas turcas dieron inicio a la Operación Fuente de Paz en contra de los terroristas del YPG/PKK y de Daesh al este del río Éufrates, en el norte de Siria, con el objetivo de eliminar los grupos terroristas que operan cerca de la frontera turca, lo que permitirá garantizar el retorno seguro de los sirios a sus hogares y mantener la integridad de Siria.

Turquía asegura que el grupo terrorista PKK y su extensión, el YPG/PYD, constituyen la mayor amenaza para el futuro de Siria, poniendo en peligro la integridad territorial y la estructura unitaria de ese país.

Turquía y Siria comparten una frontera de 911 kilómetros y Ankara ha denunciado durante mucho tiempo la amenaza de los grupos terroristas al este del Éufrates y la formación de un “corredor terrorista” en la zona.

El país euroasiático planea reasentar a dos millones de sirios en una zona segura de 30 kilómetros de ancho que se establecerá en Siria, desde el río Éufrates hasta la frontera iraquí, incluida la ciudad de Manbij. Sin embargo, la presencia de grupos terroristas como el PKK, PYD y YPG pone en riesgo su formación.

En su campaña terrorista de más de 30 años contra Turquía, el PKK, catalogado como organización terrorista por ese país, Estados Unidos y la Unión Europea, ha sido responsable de la muerte de unas 40.000 personas, incluidas mujeres, niños y bebés.

*Traducido por Aicha Sandoval Alaguna.