El gobierno de España aceptó recibir parte de los 147 migrantes provenientes de Libia que viajan en el barco de la ONG ‘Open Arms’, que lleva unas dos semanas esperando atracar en costas italianas.

El Ejecutivo de Pedro Sánchez confirmó que está dispuesto a participar en un “reparto equilibrado” de los extranjeros que viajan en la embarcación catalana y que trabaja con otros países en una estrategia liderada por la Comisión Europea (CE) para encontrar una solución conjunta.

Este es un cambio en los criterios de recepción de migrantes de Madrid, que se resistía con el argumento de que las costas españolas ya soportan bastante presión con la llegada de personas desde Marruecos.

Aún no se ha determinado el número de migrantes que recibirá España, aunque se prevé que sea más del 10% de los 147. El plan europeo que -según la prensa española- está a punto de consolidarse, plantea que las personas se distribuyan en al menos una decena de países miembros de la UE.

De acuerdo con el diario español El País, los gobiernos de Alemania y Francia ya han confirmado que aceptarán una parte de los migrantes del Open Arms y aseguraron que están en comunicación con las autoridades comunitarias para hallar una salida a la crisis.

Pero otros países como Rumanía, Portugal y Luxemburgo también han afirmado su disposición para acoger a los náufragos libios, según informó el primer ministro italiano, Giuseppe Conte.

Open Arms rescató desde inicios de agosto a los migrantes provenientes de Libia que habían naufragado en alta mar.

En lo que va de 2019, un total de 39.289 migrantes irregulares y refugiados llegaron a Europa. Unos 840 murieron en el mar, según la Organización Internacional para las Migraciones (OIM).

Más de 30.500 migrantes murieron entre 2014 y 2018 mientras realizaban el difícil viaje a Europa, indicaron las cifras de la OIM en enero.