El ministro de Salud de Brasil asegura que el colapso sanitario ocurrió por una 'imprevisión biológica'
Marcelo Queiroga declaró ante la comisión parlamentaria del Senado que investiga la gestión del Gobierno de Jair Bolsonaro durante la pandemia que deja más de 14,9 millones de contagios.

Colombia
El ministro de Salud de Brasil, Marcelo Queiroga, declaró este 6 de mayo ante la comisión parlamentaria del Senado, creada para investigar las acciones del Gobierno para detener la pandemia, que el colapso sanitario del país ocurrió por una “imprevisión biológica”.
“El colapso se debe a una imprevisibilidad biológica. Tenemos un virus de mayor contagio que el de la primera oleada, un virus posiblemente más letal, y ha habido una presión excesiva sobre el sistema sanitario”, explicó Queiroga.
El ministro indicó que el problema se debió a que el Sistema Único de Salud (SUS) del país no fue fortalecido a tiempo. “Ustedes conocen las condiciones en que se encontraba el sistema de salud en Brasil antes de esta pandemia. UCIs abarrotadas, dificultades en la atención de urgencias, problemas. Esto es lo que faltaba, uno de los puntos que faltaban, sobre todo para atender a los pacientes con síndrome respiratorio agudo severo”, dijo el funcionario.
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La diligencia transcurrió entre tensiones, ya que los senadores de afiliación bolsonarista trataron de interrumpir las preguntas que podrían incriminar al presidente en algún tipo de omisión frente a la crisis sanitaria o acto que la agravara.
Por su parte, el ministro respondió aquellos interrogantes con evasivas. Por ejemplo, cuando el senador Renan Calheiros le preguntó si estaba de acuerdo con la posición del presidente Jair Bolsonaro de tratar la COVID-19 con cloroquina, lo cual no tiene ningún sustento médico o científico, Queiroga dijo: “Esta cuestión requiere una posición técnica” y no ahondó en el tema.
Frente a la amenaza que Bolsonaro realizó el 5 de mayo de firmar un decreto que anulara las medidas restrictivas impuestas por gobernadores estatales y alcaldes para frenar el avance del coronavirus (COVID-19), que ya deja más de 14,9 millones de contagios y 414.000 personas fallecidas, el ministro informó no estar enterado de la decisión.
“No participo en la redacción de este decreto, ni he sido consultado. Lo que vamos a adoptar son medidas para evitar situaciones extremas de cierre de ciudades. Lo que el presidente me dijo es que quería asegurar la libertad de la gente. Con eso, estoy de acuerdo”, comentó.
De acuerdo con una investigación periodística publicada por el diario Folha de Sao Paulo, el Gobierno de Bolsonaro sabía de antemano que la ciudad de Manaos sufría de una grave insuficiencia de oxígeno y no hizo nada para evitar el colapso de su sistema de salud.