Las fuerzas moderadas de Siria se tomaron la aldea de al-Nayrab, en Saraqib, una puerta de entrada a la provincia de Idlib, después de una operación que comenzó al mediodía de este lunes contra grupos terroristas apoyados por Irán, las fuerzas del régimen sirio y aviones de guerra rusos.

Las fuerzas del régimen se retiraron de la aldea con muchas bajas. La ciudad era un bastión de la oposición y ocupa un lugar estratégico en el cruce entre la autopista M5 que une Damasco con Alepo y la autopista M4 que conecta Alepo con Latakia.

Siria ha estado encerrada en una guerra civil despiadada desde principios de 2011, cuando el régimen de Bashar al-Assad tomó medidas represivas y una ferocidad inesperada contra las protestas en favor de más democracia en el país.

Desde entonces, más de 5 millones de civiles son refugiados alrededor del mundo. Actualmente, Turquía alberga a unos 3,7 millones de refugiados sirios, más que cualquier otro país en el mundo, y ha gastado unos USD 40 mil millones en su manutención, según cifras oficiales del gobierno turco.

Idlib se encuentra dentro de la zona de desescalamiento del conflicto, establecida en un acuerdo entre Turquía y Rusia a finales de 2018. Sin embargo, el régimen sirio y sus aliados han roto sistemáticamente los términos del alto el fuego, y han lanzando frecuentes ataques.

Esta zona de distensión alberga a unos cuatro millones de civiles, incluidos cientos de miles desplazados en los últimos años por las fuerzas del régimen en todo el país.

Alrededor de un millón de refugiados Idlib se han desplazado hacia la cercana frontera turca en los últimos meses, huyendo de los ataques del régimen de Assad y sus aliados, lo que ha producido una situación humanitaria desesperada.

Turquía ha pedido que se ponga fin de inmediato a los ataques contra Idlib y que se respete el cese al fuego, advirtiendo que si los ataques no se detienen Turquía actuará.

*Traducción por José Ricardo Báez G.