El Departamento de Estado de Estados Unidos expresó su preocupación por la "violencia denunciada" en la ciudad siria de Manbij, después de que el YPG/PKK abriera fuego contra manifestantes, matando al menos a ocho personas.

"Instamos a todas las partes en Siria a respetar los derechos humanos y las libertades fundamentales, incluido el derecho a reunirse pacíficamente", dijo un funcionario del Departamento de Estado en un comunicado enviado por correo electrónico a la Agencia Anadolu.

"Discutimos regularmente cuestiones de derechos humanos con el liderazgo de las SDF (YPG/PKK) como un aspecto integral de nuestros esfuerzos conjuntos para promover la estabilidad en el noreste de Siria y garantizar la derrota duradera de ISIS (Daesh)", agregó el funcionario, usando otro nombre para Daesh.

El SDF, respaldado por Estados Unidos, está encabezado por el YPG, la rama siria del PKK. El PKK es una organización designada como terrorista en EEUU, Turquía y la UE, y el apoyo de Washington a su afiliada siria ha sido motivo de tensión en las relaciones bilaterales con Ankara.

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Además de las ocho personas que murieron después de que las SDF dispararan munición real contra los manifestantes, otras 27 personas resultaron heridas.

Los habitantes de Manbij, donde los árabes constituyen el 90% de la población, han estado protestando por el reclutamiento forzado de sus hijos por parte de las SDF.

El lunes, cientos de personas se reunieron en el centro del distrito de Manbij y los vecindarios circundantes para protestar contra el grupo terrorista.

*Traducido por Daniel Gallego.